Pues nada, sigo con mi condromalacia rotuliana y después de un mes sin coger la bici ni ir a correr, aunque sigo con el gimnasio, he empezado con la rehabilitación. El primer día muy bien, unas mariconadas de ejercicios que se hacen sin problemas, pero esta tarde todo ha cambiado. Me han puesto una puta maquinita que a muchos os sonará: un electroestimulador. Cuando lo ví me dije: cóño!, que chulo, se parece a los Compex esos que anuncian, por fín voy a probar uno!
Maldita la hora! Me pusieron dos electrodos en el vasto interno que es lo que tengo que fortalecer, y argggg, eso duele como to sus muelas. Te da unos calambritos y cuando empiezo a sentirlos pues tengo que poner la pierna fuerte, dura, hasta que deje de actuar la máquina. Unos diez segundos de calambre, otros diez de reposo, y así hasta diez minutos. Se te queda la pierna tan agujetosa que parece que has corrido dos horas.
Pero es que según el programa varían parámetros como intensidad, duración, etc, y el primer programa no lo he aguantado ni 5 minutos, y eso que sólo estaba en el tres, y tiene 15!!!!. Vamos, nenaza total. Sudando como un cerdo en una matanza y deseando que se acabase.
Pues venga, mañana más, y dice el tío que hay que subir bastante más.