Pues nada, que gracias a Patricia (mi mujer), pudimos disfrutar de unas cervezas con una de las personas que tenía más ganas de conocer, el señor Rosendo Mercado. Un tio normal, quizá incluso un poco tímido.
Aquí el subsodicho con la autora del encuentro.
Aquí los que nos juntamos, tampoco se lo podíamos decir a mucha gente para que no se agobiara.
Haciendo un poco de publicidad al bar-segunda casa al que vamos, que se porta muy bién con nosotros.
En el paseo marítimo de Aluche.
Los regalos que le trajo a Patricia, un pin y una taza.
Detalle del pin que tendrían que arrancar a mi mujer de sus ensangrentadas y muertas manos.
Pues nada, al que le interese, es un tio normal y corriente que no se lo tiene nada creido, con el que echamos unas risas y unas cañas.
Un beso.