El egarense Antonio Pedrero, defendido a las mil maravillas por un Movistar Team sin fisuras, resiste el ataque final de sus rivales en las rampas de Peyrepertuse y suma el 21º triunfo de la escuadra telefónica en 2021 -undécimo para los chicos-
No fue sin trabajo y sufrimiento. Antonio Pedrero y Movistar Team certificaron su éxito final en la 45ª edición de la Route d Occitanie (UCI 2.1) en una exigente cuarta y última jornada, con llegada en las durísimas rampas del castillo de Peyrepertuse (1ª categoría), donde Magnus Cort (EFN) superó in extremis a Brambilla (TFS) para llevarse el triunfo final.
Los seis compañeros de Pedrero trabajaron de manera exquisita durante todo el día. Sebastián Mora y Mathias Norsgaard mantuvieron a distancia aceptable la que habría de ser la fuga vencedora; Iñigo Elosegui y Juri Hollmann llevaron bien situados a sus compañeros en la aproximación a la penúltima subida, Maury (2ª); y en los últimos puertos, Lluís Mas y Gregor Mühlberger remataron la faena de grupo. El único gran apuro para Antonio llegó en las rampas finales, donde la mayor explosividad de Herrada (COF) y Rodríguez (APT) les permitió sumar una veintena de segundos sobre un fondista como Pedrero, insuficientes en cualquier caso para privarle del éxito final.
La Route d’Occitanie se convierte en la prueba francesa que, bajo sus distintas denominaciones, en más ocasiones ha ganado Movistar Team: ocho, desde el primer triunfo con De las Cuevas (1998) hasta los dos de Valverde (2018, 19) o este logrado hoy por Pedrero. Es el 21º éxito de los equipos de Abarca Sports en 2021 y la undécima victoria para un Movistar Team masculino que acumula nada menos que siete en los últimos veinticinco días.
Así lo vivió el ganador Antonio Pedrero: "Muy contento con toda esta semana, con la etapa de ayer y con el maillot que nos llevamos hoy. El objetivo principal era controlar bien, no dejar irse mucha gente en las escapadas y vigilar bien quién entraba. A partir de ahí, era mantener una diferencia para no tener problemas con la general. La verdad es que en los últimos 100 metros, con lo que he sufrido, pensaba incluso que podía perder el maillot, y cuando he cruzado la meta no sabía bien cuál era la diferencia con la gente de delante. He tenido ciertas dudas, pero cuando Higinio (Fernández, auxiliar) me ha dicho que eran solo 20 segundos, ya he podido respirar.