Se quedó muy cerca de su estreno como profesional. Aritz Bagües, un hombre de equipo y que se ha sacrificado siempre por las opciones de sus compañeros desde su llegada a Caja Rural-Seguros RGA, buscó el éxito en la complicada primera etapa de la Ronde de l Oise, una jornada marcada por el exigente circuito final en Liancourt.
Precisamente a la entrada de la fase decisiva del recorrido llegó el salto del guipuzcoano en compañía de James Fouché (Bolton Equities) y del neerlandés Huub Artz (Metec), el primero en descolgarse en el encadenado de cotas cuando su ventaja superaba los 2 minutos. Vasco y neozelandés demostraron mucha entereza al mantener la renta sobre un pelotón que aceleró en la parte final para acercarse al dúo. Sin embargo, Fouché, actual campeón oceánico y de su país, soltó a Bagües superada la pancarta de los últimos 10 kilómetros para alcanzar la meta en solitario.
En su regreso a la competición superados unos problemas físicos, el ciclista de Caja Rural-Seguros RGA concluía segundo, asegurando podio y liderato en una clasificación merced a los puntos sumados en los diferentes pasos de montaña. Además, Iúri Leitão finalizaba octavo en el sprint del grupo.
Aritz Bagües: "En principio buscábamos que la carrera llegara al sprint para jugarnos la victoria con Iúri o con David. Sin embargo, a la llegada de la parte dura ha arrancado el neozelandés, he salido con él, hemos remachado a la fuga del principio y de ahí hasta meta los últimos 40-45 km".
"Acabo con buenas sensaciones por el resultado pero he notado que me faltaba competición después de varias semanas sin ponerme un dorsal por una lesión. Llevaba el pulso muy acelerado y eso es lo que me ha hecho reventar, pero contento por volver así después de la lesión. Va a ser difícil porque el líder está muy fuerte, pero no ha sido mi mejor día y he acabado segundo, así que no me voy a rendir. Quedan tres días por delante y lo intentaremos. Ser segundo está bien pero hay que ir a ganar. Si no se gana que no sea por no intentarlo".
