Después de unos intensos y maravillosos días disfrutando, pedaleando y soñando en el paraíso de los Pirineos, mis piernas pedían a gritos un respiro. Pero, no quería perderme vivir la experiencia de participar en la primera edición de la ARLANZA EXTREME ALL MOUNTAIN.
Una prueba con un formato innovador y atrayente por los tramos especiales cronometrados. La prueba constaba de dos recorridos: uno de 57 km y 2256 m. de desnivel acumulado y otro de 27 km y 1128 m. de desnivel acumulado.
A las 11.00 H. del sábado partía hacia Hortiguela (Burgos) con mi amigo J.D Arriola. Las más de dos horas de viaje, se nos pasaron volando, riendo y hablando de : bicis, entrenamientos, técnica, carreras, etc. ¡ Viva el mono tema !
Llegamos al pueblito, tomamos un tentempié rápido y nos enfundamos nuestros trajes de gala, parair a ver los tramos cronometrados con Julio. El organizador y diseñador del evento y bellísima persona.
Tres tramos cronometrados. Uno mixto, una cronoescalada y un descenso. Personalmente, no sabía si ir a verlos me iba a sumar o restar porque estaba justita de fuerzas, pero mereció la pena ir y disfrutar de la ruta y compañía. Además de aprender y mejorar, algo que va en el pack cuando pedaleas con el maestro Arriola.
Después de la mecánica, para tener la Scott y Norco listas para la batalla, nos reunimos con mis compañeros de equipo Mony y Jonatan para cenar, donde risas y confidencias no faltaron.
Domingo. 9:00 H. Más de 80 bikers dispuestos a devorar kilómetros. Los cuatro a por la ruta larga. 57 kms. Ande o no ande caballo grande. 3, 2, 1 …… YAAAA!!!! LA FIESTA COMIENZA. Concentrada y dispuesta a darlo todo como siempre, daba mis primeras pedaladas con fuerza. Pero enseguida me di cuenta, que el gas lo había gastado en los Pirineos, en esos 580 km y 12.500 m de desnivel positivo en menos de una semana. Antes del km 6 me había descolgado del grupo en el que rodaba. Y simplemente, me rendí, algo raro en mí. Cambie el chip de “carrera y a tope”, y me dije: - Meri, hoy no es el día. Es una carrera muy dura físicamente y técnicamente y con acabar y llegar sana y salva a meta has ganado, jjj !
La primera parte de la carrera, me la tome con calma, incluso pare a deshinchar ruedas en la cronoescalada, paraba a beber y a coger aire en esas subidas imposibles..
Pero a medida que pasaban los kms y las horas, las piernas comenzaban a funcionar y pude apretar un poco más. Una pena que no hubiesen sido 97 km en vez de 57, cuando empiezo a funcionar se acaba la carrera, jjjj !
Llegue a meta en la posición 16 de la general y la segunda fémina, parando el crono en 4:35:10.
Mi compañera de equipo Mony fue la ganadora indiscutible con un tiempo de 4:25:38 y llevándose los tres tramos cronometrados. En tercera posición entro la corredora del Velobur, Aránzazu con 5:28:23.
En categoría masculina, el vencedor fue Martin Mata del Velobur,en un tiempo de 3:20:49, ganando el tramo cronometrado de la cronoescalada.
En segunda posición cruzo la línea de meta de caballito como es habitual en él, José Antonio Díez Arriola, con 3:29:14, siendo el mejor en el tramo cronometrado mixto y en el tramo de descenso.
El tercer corredor fue Gonzalo Fdez. Gutiérrez parando el crono en 3:32:49 y el cuarto Santiago Garrido, que demostró estar en un estado de forma excepcional.
Destacar la buena actuación del corredor de bikezona Jonatán Roca, que finalizo en sexta posición.
En el recorrido corto los ganadores fueron Paula Suárez y Markel Uriarte, corredor del Orbea, que ostenta el record del mundo de la hora a caballito, tras recorrer 29,94 kms.
Para mí, la Arlanza Extreme ha sido una carrera de auténtico mountainbike, de esas carreras que te marcan, que te hacen crecer como biker ; de las que no solo suman, sino que multiplican.
Una carrera muy dura y divertida a la vez; en un paraje precioso e inolvidable, aquellas rocas no las olvidaré fácilmente. Interminables sendas entre encinas y sabinares centenarios, trialeras, peraltes, toboganes, saltos, curveos, subidas durísimas…
Una carrera organizada con mucho cariño. Fruto del trabajo y dedicación, que ha permitido recuperar sendas que antiguamente unían pueblos y valles.
Una carrera que hay que marcarla en el calendario con fosforito porque la ARLANZA EXTREME, HA LLEGADO PARA QUEDARSE. Una carrera grande, igual que lo es su diseñador Julio Taboada.
Muchas gracias por todo. El año que viene volveremos.
Crónica de la corredora del BZ Meritxell Henales.