Carlos Sastre se ha clasificado en cuarta posición en la segunda etapa del Tour de Austria, disputada hoy entre Innsbruck y Kitzbüheler, de 158,3 km de recorrido, con final en un puerto especial de 1670 metros, con rampas que en algunos casos llegaban al 18% de desnivel. El corredor del Geox-TMC se sitúa en esa misma posición de la general, a 1:32 del vencedor de la etapa y nuevo líder, el sueco Fredrik Kessiakoff (Astana).
“La verdad es que estoy contento con el resultado y con las sensaciones. Poco a poco voy mejorando, cosa que es muy importante. Ya que no podemos estar en el Tour de Francia, tenemos la oportunidad de estar en el de Austria. Quedan seis días muy duros y vamos a tratar de hacerlo lo mejor posible”, decía Sastre al término de la etapa.
Sastre comentaba que había sido una etapa “muy rápida” y que “salvo la última subida ha sido bastante llevadera, con dos puertos, de tercera y cuarta categoría”. “Se ha hecho una escapada, se ha controlado en todo momento y hasta la última subida no ha habido demasiada tensión. Antes de entrar en el puerto sí, porque veníamos de una carretera ancha y se estrechaba mucho. Era muy importante empezar a subir en cabeza. La subida tenía 8 kilómetros y desde el comienzo era bastante dura. La primera parte tenía un porcentaje medio de desnivel entre un 8 y 10 por ciento y los últimos 3 kilómetros eran mucho más duros”, explicaba.
“El equipo me ha ayudado a entrar en cabeza en el inicio del puerto y las sensaciones no han sido malas, he podido comenzar bien y luego a falta de seis kilómetros he intentado arrancar para ver qué sensaciones tenía y cómo iba. La verdad es que me he sentido bien y en el último tramo con las rampas tan duras que había cada uno ha subido a su ritmo para tratar de no perder demasiado tiempo”, concluía el abulense.
