Ni más ni menos que 23 pruebas componen el Circuito Provincial de Burgos. Sin duda alguna el certamen más extenso de todo el calendario nacional. Ubicaciones distintas, variedad de recorridos, algunas con mucho prestigio y otras casi desconocidas. Pero todas comparten un denominador común: Los pueblos.
Pueblos donde las puertas de las casas aún se dejan abiertas, pueblos donde comprar una buena hogaza de pan, donde los perros no saben lo que es una correa y los teléfonos móviles apenas tienen cobertura. Pueblos donde ni siquiera tienen policía municipal porque no la necesitan, y puedes acampar la noche antes en cualquier lugar sabiendo que nadie te va a molestar.
Pongamos de ejemplo la última prueba celebrada en Pradoluengo, localidad ubicada a camino de ningún lugar en concreto y a las faldas de la Sierra de la Demanda. El propio alcalde del pueblo pregona la salida con un viejo altavoz sin pilas pero con más ilusión y con más nervios que los propios corredores. Contrasta la humildad de la organización con los modernos miniGPSs que se entregan a cada participante para que los servicios de rescate nos tengan localizados en todo momento. Una moto de poca cilindrada intenta abrir paso por delante de los primeros corredores. No es competitiva, pero la velocidad es libre y hay clasificación con chip. Es perfecto, nos dejan echar carreras pero sin el típico podium donde algunos se bañan con una estúpida gloria gratuita. Después un simpático lunch, el chorizo y la tortilla de patatas lo ha cocinado algún lugareño del pueblo, aunque tendrás que ingerirlo de pies.
Puede que la marcha de Pradoluengo no disponga de muchos medios, pero sin duda tienen la mejor ruta de todo el certamen. Mas de tres horas por tramos recién abiertos, bosques inclinados, suelo muy blando, campo a través y bajadas de autentico “culo atrás”. La velocidad media del primer participante lo dice todo: 15 km/h. Recorrido muy difícil pero de escaso peligro, osea, tremendamente divertido. Ni un solo herido. Está comprobado, cuanto más técnico y difícil, menos lesionados hay.
Una prueba muy humilde pero con mucho potencial. Si esta carrera la coge una empresa como dios manda, hace publicidad y le pone un nombre más comercial tipo “The Bike Demanda”, entonces se te apuntan mil participantes. Pero entonces no valdría 17 euros, valdría cuatro veces más y total para lo mismo…
En el Circuito Provincial de Burgos encontrarás desde competiciones de prestigio con premios en metálico a marchas de pueblo no competitivas, desde recorridos muy técnicos a paseos por pistas facilonas, desde sencillos lunchs con refrescos baratos a auténticas jamadas sentados a la mesa. Pero en todas encontrarás un tranquilo y remoto pueblo donde pasar una agradable mañana de domingo haciendo mountainbike.