Tres años después del paso a la élite de Enrique Sanz y Javier Iriarte, el equipo Lizarte vuelve a promocionar a uno de sus ciclistas a la categoría profesional. Tras una temporada como rosa, el colombiano Dayer Quintana formará parte en 2014 del Movistar Team, convirtiéndose en el 30º corredor de una larga lista -en la que también figuran hombres de la talla de Claus Michael Møller, Joseba Beloki, Isidro Nozal o, más recientemente, Andrey Amador, entre otros- que llega a la cúspide habiendo militado anteriormente en la formación de Manolo Azcona.
El pequeño escalador de Cómbita concurrirá con su hermano Nairo en la escuadra WorldTour, en la que tratará de dar buena cuenta de sus notables condiciones cuando la carretera se empina, exhibidas el pasado curso en aficionados en citas de prestigio como el Memorial Valenciaga o la Vuelta a Navarra. Tras conocer a sus nuevos compañeros hace una semana en un primer stage en Pamplona, Dayer repasa su breve pero intensa trayectoria en el equipo Lizarte: "La idea de venir a España a competir en amateurs fue de Nairo; él pensaba que era lo mejor para ir conociendo el ciclismo europeo. En el arranque del año comencé a correr por libre algunas carreras en Colombia pero ya habíamos decidido buscar un equipo y Lizarte me acogió desde abril".
Nada más tocar tierra, el menor de los Quintana causó sensación: "En el Valenciaga ataqué en los puertos y anduve delante; en las siguientes competencias me faltó algo de suerte para poder rematar alguna victoria. La experiencia en las primeras vueltas, Bidasoa y Navarra, fue muy buena, vi que había mucho nivel y muchos buenos corredores. En la Vuelta a Madrid estuve con los mejores el primer día pero el segundo tuve percances con la bici y ya me tuve que dejar llevar". Semanas más tarde, el boyacense rozó la gloria en el Trofeo Santiago en Cos: "Me noté fuerte pero no pude ganar por muy poco, por apenas una rueda me superó otro corredor al sprint".
Sin embargo, el tramo final de la campaña no sonrió a Quintana: "A partir de la carrera de Cos y hasta el final no pude dar el máximo, algo me pasaba; entrenando sentía que iba rápido pero en las carreras algo no marchaba bien". El colombiano concluye valorando la temporada del ya su exequipo: "Fue excelente, todos queríamos conseguir muchas victorias y se pudo cumplir para nuestra alegría. En Lizarte he estado muy contento; desde el principio lo que más me sorprendió fue el buen ambiente entre los compañeros. Pasar al Movistar Team y compartir equipo con Nairo es un orgullo. Ante todo lo veo como un reto".