Nueva entrega de la serie en la que conocémos un poco mejor a las personas detrás de las bicicletas Mondraker. Hoy conocemos a Luis Martínez.
¿Porqué Luis lleva una bici que no tiene nombre? ¿En qué está trabajando en estos momentos? ¿De qué está más orgulloso? Encuentra las respuestas a dos de estas preguntas en la serie de preguntas y respuestas exprés en otra edición más de “Conoce al equipo Mondraker”.
Luis, descríbenos que es lo que haces en Mondraker.
Jefe de producto, es decir, planear todo lo que va a venir.
¿Qué es lo mejor de trabajar en Mondraker?
Que después de 20 años trabajando en Mondraker, nos mantenemos fieles a las raíces de la marca.
Luis, ¿quién es tu corredor favorito y porqué?
Fabien Barel. Nunca he conocido a nadie como él, que lleve este deporte a un nivel tan alto de profesionalidad.
¿Cual es tu modelo favorito de toda la historia de Mondraker?
No puedo pensar en otro modelo que no sea en el que estamos trabajando en estos momentos y que pronto verá la luz.
¿De que estás más orgulloso?
Cada temporada, cuando veo todas las bicis en nuestro showroom, siento una magia muy especial…
Cuéntanos qué bici o bicis tienes ahora y porqué.
Normalmente uso prototipos. Es parte de mi trabajo y la mayoría de ellos no tienen ni nombre de modelo.
O sea, que usas prototipos… ¿Cómo los desarrolláis?
Cada proyecto requiere de un programa de prototipos distinto dependiendo de lo que necesitamos conseguir. Comenzamos con los prototipos de cinemática que están realizados normalmente en aluminio, con diferentes puntos de giro y pivotes que nos permiten intercambiarlos fácilmente y adaptar la cinemática para tener un comportamiento distinto de la suspensión. También usamos estos ‘protos’ para probar diferentes geometrías, si es algo que necesitemos. La última fase del programa de prototipos es donde empezamos a trabajar con el carbono con diferentes tipos de laminados. Normalmente la lucha está en conseguir un cuadro lo más confortable posible dentro del objetivo que tengamos fijado en el peso final. Todos los que trabajamos en un programa de test, compartimos una misma carpeta donde vamos apuntando nuestras sensaciones y comentarios.
¿Qué hay de diferente en la forma en la que Mondraker trabaja con los prototipos?
Fabricamos un montón de prototipos distintos. Muchos de ellos ni siquiera los hacemos con un propósito comercial, sino por un tema de ‘por si acaso’… Es lo que llamamos prototipos experimentales o de experiencia, para probar algunas ideas que nos rondan la cabeza. Cuando lo vemos y lo probamos, es el momento de saber si se puede usar o adaptar a la producción. Sino lo usamos, lo dejamos apartado pero no olvidado, ya que de cada idea siempre sale algo que puedes usar en otra ocasión.
Creo que este es uno de los puntos fuertes en Mondraker. No somos una empresa muy grande con muchos empleados trabajando en cada proyecto, lo que nos permite que las decisiones se tomen rápido y sin pasar por demasiados filtros.
¿Cuándo sabes que un proyecto ya esta 100% terminado?
Sabemos que el prototipo esta listo para el siguiente paso, cuando todos los objetivos que se buscaban se han conseguido. A veces no es fácil tomar esa decisión, porque siempre queremos mejorar o añadir algún detalle final antes de iniciar el proceso de producción.
En el departamento de I+D ¿tenéis algún súper secreto de esos que si nos cuentas nos tienes que matar…jajaja?
Nos reunimos con todas las marcas del mercado una vez al año y decidimos cual va a ser el próximo estándar…. (es broma ¿eh?, jajaja).
¿Cuál ha sido el mejor comentario o consejo que te han dado?
Tenemos un montón de demanda de bicis de gente que trabaja en la industria; marcas de componentes, proveedores, periodistas… Este sin duda es uno de los mejores feedback que podemos tener. Sobretodo mucha gente experta que puede usar la bici de la marca que quiera.
¿Que le hace a Mondraker tan especial como marca?
Mondraker es algo único… Todo aquel que monta nuestras bicis lo puede sentir.