Me gustan las pruebas raras, distintas, originales. Maratones de orientación con el gps, salir de noche con un foco, carreras de enduro, descensos avalancha… Y la Isard Atac Bike es una de esas pruebas diferentes.
Para empezar, antes de tomar la salida te suben comodamente en autobús al Coll de Ares a más de 1.500 metros de altura. De esta forma te ahorras el típico primer esfuerzo en frío. Al poco de salir ya empiezan los descensos. Y menudas bajadas, hacía tiempo que no me impresionaron tanto con trialeras y zonas muy lentas y reviradas. Por fin una prueba en la que parece que estas mas tiempo bajando que subiendo. Son dos días de ruta en alta montaña, nada de senderito de diseño artificial, aquí todos los caminos son salvajes y agrestes. Palabra de sabio: Cuantas más veces te hagan bajarte de la bici, a sitios más espectaculares te harán llegar. Y otra idea simpática: Avituallamientos neutralizados. Esto significa que te detienen el crono para que puedas comer, beber, mear, o lo que te plazca tranquilamente. Gracias.
A este formato, los organizadores de la Isad Atac lo llaman "All Mountain". Pero seamos sinceros, sufrir sufres igual que en cualquier maratón y al final las subidas ponen a cada uno en su sitio. Por eso yo utilicé mi bici rígida de siempre, ante los atónitos ojos de los catalanes que se descojonaban cuando les decía -es que los de Bilbao no usamos doble suspension-
De salida me era imposible seguir a los 3 o 4 primeros. Aguantaba mas o menos con los siguientes, pero despues a meta llegaba bastante retrasado porque paraba a echar la siesta en los avituallamientos neutralizados. No se que puesto hice, aún no he mirado la clasificación, pero me imagino que bastante bien. De todos modos la filosofía Isard Atac no es muy competitiva. La ceremonia de podium apenas duró un par de minutos, lo justo para homenajear a la experta aventurera Ada Xinxo, y a Joan Llordella del Buff-Scott, equipo que suele dejarse ver a menudo en este tipo de pruebas.
Yo pensaba que Isard era el pico de alguna montaña de los alrededores de Camprodon. Pero estaba equivocado, resulta que es el nombre de un rebeco salvaje, una cabra montesa que habita en esta zona del pirineo oriental, y que refleja el espíritu del evento. Un producto original y genuino, pero en vías de extinción porque desgraciadamente los seres humanos prefieren la masificación. Pero yo mientras existan, siempre elegiré este tipo de pruebas exclusivas...
Crónica de: Joseba León, corredor del BZ Team
Gracias a los patrocinadores del BZ Team por ayudarnos en estas aventuras: Faster Wear, Jaime Llorente, Navali, Luck, Eubottle, Rifyl, Suomy y NRC por ayudarnos a lograr estos éxitos.