La renovada selección española ha pasado la reválida del Europeo de Plumelec (Francia) con nota, al conseguir la medalla de bronce con Dani Moreno, en una prueba dilucidada al sprint con victoria del gran favorito, y fácil, el eslovaco Peter Sagan y con el francés Julian Alaphilippe ganado al español por milímetros. Por su parte Luis León Sánchez era décimo, a 3”.
Y es que, aparte del resultado, España cumplió, controlando la carrera en todo momento, pero sin excesivos desgastes en la parte inicial. Así, se permitió una fuga de cuatro corredores marcó la parte inicial de la carrera: el neerlandés Lindeman, el suizo Lang, el ucraniano Bratashchuk y el estonio Raid, que llegaron a tener once minutos. Por detrás un leve aumento de ritmo y el paso de los kilómetros fueron la condena progresiva de los escapados, siendo Lindeman el último en caer, justo cuando se producía el primer movimiento serio en el pelotón, con Geniez (Francia), Gasparotto (Italia), Vanendert (Bélgica), Owsian (Polonia), Buchmann (Alemania) y Ludvigsson (Suecia), y De la Cruz como ‘marcador’ español.
Un segundo intento, esta vez con casi una veintena de corredores, tuvo de nuevo a De la Cruz y a Fraile como protagonistas. Pero el momento más peligroso fue un corte en la penúltima vuelta con tres belgas –entre ellos Gilbert-, dos franceses o dos italianos, en el que Rubio jugó un gran papel, y que obligó a tirar a España, produciéndose la paradoja de ver a varios belgas también en cabeza del pelotón. En la penúltima subida, eran neutralizados por un pelotón reducido a unos 40 corredores con Luis León, Rubio, Moreno y De la Cruz como representantes españoles.
Italia quiso jugársela desde lejos, con un ataque de Moser, a 12 kilómetros, que llegó a tener medio minuto y que supuso los últimos coletazos del gran trabajo de Rubio. Otro italiano, Vilella, le relevó. Pero ahí apareció Sagan, primero trabajando para sí mismo como si fuera su mejor gregario; y luego en un sprint en el que no tuvo rival, y en el que el propio Moreno no estaba muy convencido incluso tras haber pisado el podio de haber sido tercero.
Como decíamos, una de las grandes revelaciones de este Mundial era Rubio, trabajador en todo momento. “Sabía a lo que venía, cual era mi función y había que darlo todo. Para mi ha sido una gran satisfacción poder estar tanto en el principio como en la parte final, cubriendo ese ataque tan peligroso de Gilbert y los belgas, aunque lo más importante es que hemos llegado con opciones para que Dani pudiera rematar con una medalla”. El abulense terminaba en el puesto 48, a 3:03.
De la Cruz fue otro de los corredores más activos de la selección y que terminó “completamente reventado. Creo que hemos hecho un gran Mundial, controlando bien la carrera y cuando hubo movimiento de gente importante, me tocó salir a mí, igual que luego estuvieron Fraile o Rubio. Además, hemos podido rematar al final con una medalla”. El catalán era el tercer español clasificado, trigésimocuarto, a 1:00 del vencedor.
Sobre el remate nos explica Luis León que “a falta de dos vueltas hablamos Dani y yo, que éramos los que debíamos rematar, que si había alguna fuga probase yo y que si no, que él se reservaba para la llegada, al ser más rápido. Y aunque hubo algún movimiento, la gente que pensábamos como Ulissi o Costa no lo hicieron. Creo que hemos jugado bien nuestras bazas”.
Barbero (63), Fraile (65), Lobato (86) y Mate (92) también terminaban la prueba, mientras que Rubén Fernández fue la cruz de la moneda, al tener que abandonar por caída, cuando estaba dando unas excelentes impresiones, a falta de algo menos de dos vueltas. “En la curva se me fue la bici y me fui al suelo. Me hice varios raspones, pero lo peor es que ya perdí un tiempo que no pude recuperar. He tenido buenas sensaciones y pienso que todos hemos hecho un gran trabajo”.
fuente: rfec.com