David Ribas mejora la segunda posición de ayer en la Transpyr Road y es el más rápido en la infernal ascensión al Coll de Pradell
La Transpyr ha vivido la segunda etapa en una jornada marcada por la recuperación de la temperatura, que ha permitido a los ciclistas rodar en unas condiciones muy favorables. Aunque todavía castigados por la dureza de la etapa inaugural, con mucha lluvia y frío, los 345 supervivientes han encarado el itinerario de Camprodon a La Seu d’Urgell con la larga ascensión a la mítica Collada Verda como primer escollo. Los más rápidos han sido la pareja del equipo Probike, David Mateu y Pau Botella, seguidos a pocos segundos por Israel Núñez y Roberto Bou.
La etapa de hoy, de 114 kilómetros y 2.190 metros de desnivel, ha pasado por la estación de esquí de La Molina y la Collada de Toses, con llegada a La Seu d’Urgell.
La de mañana es la más larga y considerada la etapa reina de la Transpyr, con un recorrido de 119 kilómetros y un desnivel de 2.930 metros entre La Seu y El Pont de Suert, lo que la convierte en una de las más duras de las 7 etapas de la prueba, por su distancia y desnivel.
En cuanto a la modalidad Transpyr Road, hoy ha vivido su etapa reina con la mítica subida al Coll de Pradell, considerado uno de los más duros de Catalunya con rampas de hasta el 23% de desnivel. Aquí y en el Coll de Josa se ha disputado la crono de 35 kilómetros, que se ha adjudicado David Ribas por delante de Adolfo Tannenbaum.
Los ciclistas de carretera mañana tendrán un tramo cronometrado de 53 kilómetros con la ascensión al puerto del Cantó, que en varias ocasiones ha sido escenario de la Vuelta a España y la Vuelta a Catalunya. En total cubrirán un trayecto de 136 kilómetros hasta El Pont de Suert.