El gravel ha pasado su fase más difícil. Esa en la que tenía que dejar atrás el aura de “modalidad de moda” para confirmarse como una disciplina estable y con una base de practicantes numerosa. Un salto que muchas otras variantes del ciclismo nunca han llegado a conseguir. Pero el gravel ha llegado para quedarse. Lo hace porque es una forma de entender el ciclismo lógica, funcional y divertida. Ha nacido alejada de la competición y ha logrado situarse a medio camino entre el ciclismo de carretera y el mountain bike, atrayendo a practicantes de ambas modalidades.
De hecho, el gravel tiene muchas interpretaciones posibles. Muchas formas de entenderlo. Tan variadas y diferenciadas que muestran el amplio abanico de posibilidades que se han abierto con su consolidación. La esencia del gravel se basa en poder rodar con bicicletas que comparten un diseño similar a las de carretera por terrenos alejados del asfalto. De hecho, la evolución y popularización del gravel debe mucho a las nuevas tecnologías. El concepto que el gravel presenta no es nada nuevo. Pero, hasta hace poco, el material no lo hacía accesible a la mayoría de los usuarios. Lo que hoy entendemos como gravel era una tortura para el grueso de sus potenciales practicantes. Pero varios factores han jugado un papel clave en la creación de bicicletas que acercan el off-road a las ruedas finas y los manillares curvos.
Uno de los principales ha sido el tubeless. Gracias a las ruedas sin cámaras y con líquido sellante para los pinchazos, principal lacra de los usuarios cuando rodaban con neumáticos tan finos y cámaras por terreno abrupto, se han reducido a la mínima expresión. Un proceso que ya vivió el mountain bike hace unos años. Los frenos de disco son el otro pilar de las bicicletas actuales de gravel, esas que han acercado la disciplina a miles de usuarios de todo el mundo. Una frenada suave, potente, modulable, constante y segura, independientemente del clima, ha roto barreras en la adopción de las bicicletas de gravel.
Tras esos dos pilares básicos del gravel en cuanto a tecnología hay, ahora, multitud de avances específicos: desde manillares totalmente ideados para gravel a cuadros con geometrías que permiten separarlas de las que, hasta hace poco, eran sus hermanas gemelas: las bicicletas de ciclocross. Si en el ciclocross se busca la máxima agilidad, reactividad y velocidad, en el gravel se potencia la seguridad y la estabilidad. Por norma general las bicicletas de gravel cuentan con una distancia entre ejes más elevada, unas vainas más largas y un ángulo de dirección más relajado. Si a ello sumamos que no tienen que cumplir la limitación de anchura de neumáticos que la UCI impone en el ciclocross vemos que los diseñadores pueden crear cuadros con mayor espacio para las ruedas y con ello se ha creado la tendencia que más y mejor diferencia al gravel: la posibilidad de usar ruedas de 700cc con neumáticos relativamente estrechos o emplear ruedas de 650B (27,5”) con neumáticos mucho más anchos y con un balón más generoso.
La diferencia entre esas dos posibles configuraciones de ruedas es abismal. Monta rueda de 700cc con neumáticos de gravel y tendrás una bicicleta más rodadora y menos cómoda. Hazlo con ruedas de 650B con neumáticos que suelen llegar hasta los 2,2” y tendrás unas ruedas que ofrecen un plus adicional de agarre y, sobre todo, de comodidad. Los usuarios de gravel que ruedan por un terreno más exigente suelen optar por el 650B, mientras que los de 700cc suelen optar por trazados más lisos o con tramos de carretera más largos. Todos estos rasgos característicos de una auténtica bicicleta de gravel los podemos encontrar en modelos como la recién presentada Basso Palta, un modelo que reúne toda la tecnología diseñada para las bicis de gravel y que los visitantes de la Sea Otter Europe Costa Brava Girona podrán presenciar en vivo.
Usuarios de todo tipo
El gravel engloba a usuarios con tipologías totalmente diferentes. Desde las personas que buscan una bicicleta básica, sin complicaciones y simple, para afrontar largos viajes en los que combinar de forma eficiente pistas y asfalto, hasta la nueva generación de practicantes de gravel para los que cada salida con este tipo de bicicletas se ha transformado en un auténtico ritual que va más allá de la propia salida. Este último grupo es el que ha permitido que aparezcan marcas con modelos de gravel de gama alta. Un colectivo que representan el cuidado por el detalle y que no solo busca el mejor material para su bicicleta, sino que tanto su equipación como la experiencia que busca vivir se sitúa en el rango premium. Eso ha permitido que el gravel más “cool” haya logrado abrirse camino en el mercado. A él se asocian empresas de viajes y eventos espectaculares, normalmente alejados de la competición y centrado en la experiencia, por todo el mundo. De esta forma el gravel engloba desde usuarios principiantes y “batalleros” a un destacado colectivo que busca una experiencia diferenciadora en todos los aspectos.
LAZER CENTURY GRAVEL JOURNEY
El aumento del peso del gravel quedará reflejado en el programa deportivo de la Sea Otter Europe Costa Brava Girona. En este 2019 habrá doble ración de gravel, con una prueba el sábado y otra el domingo. La Lazer Century Gravel Journey será la cita que abrirá estos dos días de gravel en Girona. No sólo eso, sino que servirá para celebrar el centenario de una marca emblemática en el mundo de los cascos para ciclismo como es Lazer. Próximamente apertura de inscripciones.
GIRONA GRAVEL RIDE SIGUE TRIUNFANDO
El domingo será el turno de la Basso Bikes Girona Gravel Ride by Bioracer. 75 km para recorrer el corazón de las Gavarres, una región que se ha mostrado como perfecta para los practicantes del gravel y que está en la lista de destinos obligados de buena parte de los aficionados a esta disciplina. Una forma de descubrir territorio de forma cercana y de recorrer todo tipo de terrenos. La provincia de Girona lleva años posicionándose como un lugar perfecto para el gravel. Tanto que se ha convertido en uno de los puntos de encuentro predilectos por practicantes del gravel de todo el mundo. Así lo demuestra el ecosistema de tiendas, eventos y marcas que tienen presencia en esta región relacionados con el gravel. Inscripciones abiertas. + Información: gironagravelride.
La Sea Otter Europe Costa Brava Girona será, de nuevo, un lugar perfecto para descubrir qué supone el gravel. Desde sus mejores productos, expuestos en su amplia feria, a cómo se vive la disciplina en directo, con la salida y llegada de dos nuevas pruebas gravel. ¿Te lo vas a perder?
Foto: Francesc Lladó / Ocisport