Cuando compramos siempre tenemos que elegir. Es lo que tiene vivir en una sociedad de consumo como la actual con muchísima oferta disponible, inabarcable incluso para la gran demanda que también existe.
Sin embargo, normalmente las decisiones son fáciles. Primero porque, en la gran mayoría de casos, no es esencial elegir bien y, segundo, porque normalmente sabemos lo que queremos adquirir.
Pero en el caso de las bicicletas nunca es tan fácil. Aquí sí que es esencial elegir bien y, en la mayoría de los casos, tampoco se tiene muy claro qué tipo de bici se quiere comprar. Por eso es importante seguir una serie de pasos para que la compra de la bicicleta sea satisfactoria en todos los sentidos.
- Saber qué tipo de bicicleta se quiere comprar
- Intentar informarse lo mejor posible sobre ese tipo de bicicleta, pros y contras
- Buscar las mejores tiendas especializadas de la zona
- Dejarse asesorar por los profesionales
- No elegir una bici en concreto únicamente por el precio
Saber qué tipo de bicicleta se quiere comprar
Obviamente, todo el mundo tiene una idea más o menos clara del tipo de bici que quiere. Hay dos grandes clasificaciones, las más populares, la de montaña y la de carretera.
Sin embargo, cuando se habla de saber bien el tipo, no nos referimos a esta clasificación. Nos referimos a una más profunda. ¿Para qué se quiere la bicicleta? ¿Ocio, paseo, deporte? ¿Para uso diario? ¿Para entrenamiento duro? ¿Para ir un día a la sierra?
Comprar una bici no tiene nada que ver con aprovechar una oferta específica. No es lo mismo elegir una casa de apuestas porque se han encontrado unos códigos promocionales para apuestas, casinos y póker que elegir un tipo de bici porque ahora está rebajada. No, una bici es una compra realmente seria, por lo que hay que saber qué se quiere y para qué se quiere.
Intentar informarse lo mejor posible sobre ese tipo de bicicleta, pros y contras
Una vez que se sabe lo que se quiere, viene la hora de buscar información sobre este tipo de bicicleta. En este sentido, internet es una gran ayuda siempre. Buscar información en una web de bicicletas como esta misma, siempre va a ser positivo, permitiendo al futuro comprador tener más claro el modelo e incluso la marca.
Sí, hay muchísimas opciones aun sabiendo el tipo de bicicleta que se quiere. Todas las marcas tienen la mayoría de tipos y modelos y, precisamente por eso, es tan difícil encontrar la bicicleta perfecta.
Buscar las mejores tiendas especializadas de la zona
Una cosa es buscar información en internet y otra muy distinta comprar a través de la red de redes sin haber visto la bicicleta físicamente. Desde aquí, recomendamos que siempre se busque una tienda física, para al menos ver la bici directamente.
Obviamente, si ese mismo modelo de bicicleta se encuentra más barato en internet, muchas personas comprarán el producto online, algo que es inevitable.
Sin embargo, las tiendas presenciales tienen una ventaja, el trato humano, algo que da mucha confianza y que es esencial en el siguiente punto.
Dejarse asesorar por los profesionales
Nadie sabe de todo, esto es un hecho. Por eso, siempre conviene dejarse asesorar por aquel que es especialista en aquella cosa en la que se está interesado. Y en las bicis, quizá tiene mucha mayor importancia.
Hay que tener en cuenta que mucha gente cree saber más de bicicletas por ser un producto popular, de toda la vida, y que tiene un funcionamiento sencillo. Sin embargo, esto no es así, y menos ahora.
Las bicicletas se han especializado hasta tal punto que es muy difícil que alguien de fuera pueda entender perfectamente las diferencias de cada una, tanto en funcionalidades como en calidad y precio.
Por eso, siempre se recomienda fiarse de los expertos de las tiendas. Estos quieren vender, obviamente, pero de nada les vale una venta que a los dos días sea devuelta por no haber sabido aconsejar bien al cliente. Es por eso que la gran mayoría hacen bien su trabajo y asesoran al comprador para que se lleve exactamente lo que busca.
No elegir una bici en concreto únicamente por el precio
El precio siempre es importante, pero en cuestión de una bicicleta, que se supone que va a durar varios años, quizá no es el elemento primordial a la hora de elegirla. Más que nada porque a la larga comprar una bicicleta peor por ser más barata sale más caro, ya que se estropeará antes o será más difícil de arreglar.
Gastarse un poco más y elegir la bici perfecta para cada uno sale a cuenta. Siempre. Otra cosa es que dos bicicletas exactamente iguales tengan distinto precio que, en ese caso, obviamente hay que elegir la más barata. Si no es el caso, siempre elegir por funcionalidades y calidad, no por el precio.
Y una vez realizado todo este camino, que puede ser largo y tortuoso, ya queda lo mejor. Disfrutar de la bici comprada.
Fotos: Pexels/Pixabay