Javier Ruiz de Larrinaga y Aida Nuño, muy motivados, saldrán a dar su máximo en las dos pruebas UCI que completan el primer invierno como conjunto de los tetracampeones de España Middelkerke y Eeklo cierran el año del MMR-Spiuk CX Team
El MMR-Spiuk CX Team despide la temporada que lo vio nacer este fin de semana con dos carreras UCI de alto nivel: el Noordzeecross de Middelkerke, última cita del Superprestigio (sábado, 13.30h féminas / 16.30h hombres), y el GP Stad Eeklo (domingo, 14h féminas / 15.15h hombres). Y al contrario de lo que suele suceder en el ciclismo, Javier Ruiz de Larrinaga y Aida Nuño llegan motivados, fuertes y con ganas de cerrar por todo lo alto la que ambos definen en público y privado como su mejor campaña. El alavés valora “la gran competitividad que estamos viendo para ser un final de año. El fin de semana pasado salimos 60, no falta nadie y es complicado meterse entre los 25, porque el nivel es altísimo, pero desde luego, estamos manteniendo nuestro rendimiento normal, sin desentonar y eso ha de dejarnos satisfechos”.
“Middelkerke parece más exigente que Lille y Hoogstraten, al menos por referencias de otros años, y a la vez infliurá mucho si hay barro o no. Parece que el fin de semana puede llover algo. Veremos cómo sale la carrera, aunque con la superioridad de los jóvenes y la insistencia de los veteranos como nosotros, este año se ha subido un nivel”, destaca un Larrinaga que deja un apunte sobre “la forma de correr: hasta el año pasado había más marcaje, pero ahora desde el principio se sale a tope para marcar diferencias. Ya no existen las vueltas de ‘mirarse’ que protagonizaban los Nys o Pauwels cuando llevaban el mando de una nueva. Es normal: el carácter de los jóvenes les hace venir con todas las ganas, y no sólo nosotros, sino todos los grandes nombres lo están acusando”.
Nuño, por su parte, mucho más ilusionada tras el 7º y 12º lugares que logró el pasado fin de semana, dejaba un titular: “Habría sido un error faltar a estas carreras. Es cierto que durante el Mundial, ni siquiera al terminar sino ya en las dos últimas vueltas, quería que se acabase todo de una vez y llegué a plantearme parar después de Tabor. Descubrir el ambiente de este mes de febrero y disfrutar de un nivel tan grande, aprendiendo un montón de estos circuitos y sumando puntos UCI como lo hicimos la semana pasada, me hace ver como un acierto haber continuado. Ojalá pueda hacerlo más años”.
Sobre Middelkerke en sí, Aida se muestra igualmente esperanzada: “Será bonito, con un montón de competidoras, casi en la misma línea que todos los Superprestigio de este año, con una participación que nada tiene que envidiar a las Copas del Mundo. Tengo ganas de llegar al sábado y ver si la lluvia lo hace más embarrado o si se mantiene tan rápido, de hacer buena salida y cerrar el año con buen sabor de boca con, esperemos, otras dos actuaciones como la del domingo pasado”.