Movistar Team lidera por equipos la Vuelta al País Vasco tras una gran actuación de David López, Tondo e Intxausti, a pocos segundos de los líderes. Abandono de Madrazo
Movistar Team ha demostrado su gran nivel conjunto en la primera etapa de la 51ª Vuelta al País Vasco, típica jornada de la ronda euskaldun con 159 kilómetros de escarpado recorrido que incluía seis altos puntuables, el último de ellos, La Antigua, con rampas en torno al 20% de desnivel.
La escuadra telefónica, alerta durante toda la etapa en cabeza de pelotón, se ha codeado con los mejores en la subida final y se sitúa al frente de la clasificación por equipos de la carrera tras la notable prestación de David López (7º), Xavi Tondo (10º) y Beñat Intxausti (11º), que entraban en el grupo de siete corredores que llegaban seis segundos después del cuarteto formado por Joaquim Rodríguez –vencedor y primer líder-, Samuel Sánchez, Klöden y Horner que se destacaba en los últimos metros de ascensión. También Vasil Kiryienka demostraba su buen estado de forma en un terreno que no se adaptaba a sus características entrando en el siguiente grupo de una docena de unidades que incluía, entre otros, a Basso, Vinokourov o los hermanos Schleck.
La nota negativa de día ha sido la caída de Ángel Madrazo en el descenso del alto de Elosua, poco después del ecuador de la etapa. El joven cántabro ha sufrido un fortísimo golpe que ha recomendado su abandono por parte de los médicos de la carrera. Aunque la caída le ha provocado mareos y desorientación, los primeros análisis realizados en el Hospital de Zumárraga parecen descartar lesiones importantes al margen de las múltiples contusiones y de varios puntos de sutura en su rodilla izquierda. Durante la tarde se le va a realizar un scanner para descartar definitivamente cualquier lesión.
Beñat Intxausti: “Ha sido un día muy duro tanto por el ritmo, como sobre todo por la dureza del recorrido y por las carreteras. El terreno estaba peligroso y eso hace que la tensión se multiplique. Los últimos 50 kilómetros han sido de muchos nervios. El equipo ha estado muy bien y hemos entrado bien colocados en La Antigua. Pero había muy poco sitio para pasar y, aunque he ido remontando, me he quedado un poco encerrado en la parte de arriba y ya no he podido enlazar. Han sido una pena esos segundos que hemos perdido tanto David como Tondo, pero hemos demostrado que tenemos un buen bloque y espero que podamos aprovecharnos de esa superioridad numérica para jugar nuestras bazas. La pena ha sido la caída de Madrazo. Iba justo delante de mí y se ha dado un golpe tremendo. Esperemos que se recupere pronto”.