Finalizado el calendario oficial 2010 del Open Natura, el programa de actividades de su club no se detiene, y una de las últimas actividades realizadas ha sido la de la Ruta de la Capablanca, la cual ha estado liderada por el aventurero Sergi Fernández Tolosa, quien no ha dejado de atender a todos los bikers participantes, responder sus preguntas y contarles sus planes de futuro.
130 km en dos etapas
Los casi 50 bikers participantes han completado la Ruta de Capablanca en dos etapas los 130 kilómetros del recorrido. La primera etapa partía a las 09.00 horas de la localidad de Sant Quirze del Vallllès, dirección a Matadepera, pasando por localidades como Rellinars, sufriendo de lo lindo en ascensiones como a la Casa Nueva del Obac o la del ‘coll de infern’, donde todos los participantes tuvieron que apretar los dientes. Ya en este punto, más de un participantes entendía por qué en el briefing previo se informaba de que para tomar parte en esa prueba había que tener una mínima condición física, ya que se iba a estar entre seis y siete horas sobre la bici.
La segunda etapa, con el cansancio en las piernas de la jornada precedente, partía de Navarcles, y pasaba por Monistrol de Calders, Granera, Sant Llorenç, Castellar y finalmente concluir de nuevo en Sant Quirze del Vallès, puesto que ésta ruta tenía un carácter circular.
Sin rastro de Capablanca
Finalizada la etapa, los participantes estaban satisfechos por un doble hecho. Por haber completado una dura, pero a la vez divertida ruta, y por haber hecho historia al dejar que las cubiertas de sus tacos transitaran por los mismos caminos que en su día dominaba Capablanca. Éste hombre, que al principio no era más que un humilde labrador que se ganaba la vida haciendo de mozo por las masías, acabó convirtiéndose en uno de los bandoleros más legendarios del Camino Real y de la Sierra del Obac, y su ápodo proviene de la capa que hacía servir en sus asaltos.