Me habían hablado de ella, pero nunca he tenido el placer de disfrutar de una Semana Santa en Cataluña y este año La volcat ha llegado a mi vida para quedarse de por vida.
Cuando te hablan de pruebas completas donde hay un poco de todo, pistas, senderos, bajadas impresionantes, zonas técnicas, de motor; Piensas, si hay mil participantes me tocaran enormes colas y atascos de los que solo se libran los pros. No te voy a engañar, alguna cola pillé y algún atasco tamién, pero lo normal, he podido gozar de unos senderos y unas bajadas de ensueño, las zonas de bosque y dunas de arena aún me ponen la piel de gallina al recordarlas. Este primer contacto con la Volcat ha sido como un baile de novios que se han conocido, nos hemos mirado a los ojos y nos hemos enamorado.
Como viene siendo costumbre cada año somos más y más mujeres las que nos damos cita en la línea de salida, fotos, abrazos, reencuentros, cotilleos , es un hervidero de buen rollo, compañerismo y camaradería. “Adoro veros a todas chicas” es una de las partes buenas de sufrir en carrera, rodearte de gente que vive como tu la pasión del mtb.
Mi experiencia personal a ha sido de 10 sobre 10, en la competitiva me quedé con las ganas de intentar ir a bloque y darlo todo. Pero las averías mecánicas me dejaron fuera de juego, mi mecánico no sé si quiere heredar mis bicis o mi furgoneta, pero como siga así me voy a matar un día JAJAJAJAJ. La verdad es que mi bici está viejita, lleva mucha batallas a mi lado y pide una Uci con urgencia.
Agradecer a los que se pararon para ayudarme a reparar dos roturas de cadena en la primera etapa, John me decía, no tengo material para ayudarte, pero de aquí no me muevo hasta que lo arreglemos un buen rato después, llego mi compañero de fatigas Pepelu, que sin dudarlo se para, saca sus herramientas consigue hacerme llegar a meta muy alejada de mi puesto en féminas pero feliz….. qué track madre mía habíamos sobrevivido en la primera etapa.
La segunda etapa …… 3, 2, 1 salida y ni una sola pedalada doy, se rompen los eslabones reparados de mi cadena en la misma línea de salida. Tengo que dar las gracias a Manu , que desde la carpa Giant Live, no duda en salir en mi ayuda. Tardo mucho en conseguir arrancar ya no queda nadie en la salida, unicamente la modalidad open y allí comienza mi 2ª aventura, a través de un páramo desolado de corredores y con vientos de más de 50km/h, retirarse no entra en mis opciones, solo queda remontar y disfrutar, fue duro no os voy a engañar, muy duro, pero me quito las trabas de mi cabeza y comienzo a gozarla adelantar gente y remonto hasta donde puedo .
La tercera etapa, en la parrilla de salida se hacían apuestas de qué me iba a suceder hoy. Salí a por todas, con todo lo que me quedaba, disfrute mucho no, lo siguiente, el trazado es espectacular, pero mi horquilla se muere, la rueda delantera dice ya no puedo más, radios rotos, buje destrozado sin rodamientos y mis frenos fallando, qué más me podía pasar. Mi espalda ya no puede absorber más baches y me dice, Mony afloja que no podemos más. Llegar a meta fue un calvario de dolores y miedo a que mi bici se desintegrara. Pero allí llegue, dolorida pero feliz. Una prueba para enmarcar, una organización de lujo unas etapas de ensueño. Viver la Volcat es increíble .
Mi recomendación, vete a la zona de acampada, rodéate de amigos, furgos, tiendas de campaña y caravanas, llevate tu bici de mtb y el año que viene nos vemos allí.
Por: Monica carrascosa Bikezona Team