Julen Amézqueta (Caja Rural-Seguros RGA) ha demostrado con sus últimas actuaciones su madera y su calidad ciclista, con los mejores en una clásica del nivel del GP Industria&Artigianato en Italia (18º) y luchando por el triunfo en la Clássica da Arrábida en Portugal (7º).
El ciclista navarro asoma y piensa que su línea es "ascendente", un momento de forma que espera alargar en sus próximas carreras. La Settimana Coppi&Bartali es su siguiente escala y después le esperan el GP Indurain y la Vuelta al País Vasco en casa.
Está en un momento dulce. Tenía ya ganas de volver a tener estas sensaciones sobre todo para recuperar una confianza que quizá había perdido el año pasado. Además, siento que mi estado de forma va en progresión para los meses importantes que vienen ahora.
En el GP Industria & Artigianato estuvo a la altura de Carapaz, Majka o Pinot. Y poco le faltó para rematar en Portugal. En Italia, cuando se seleccionó la carrera en el último puerto, estaba en cabeza. En Arrabida, más de lo mismo. Sabíamos que podíamos tener la oportunidad de ganar. Cuando la carrera estaba rota, decidí probar, aun sabiendo que era un poco lejos. Me la jugué a 20 de meta. No me faltó mucho. El trabajo al menos lo pudo rematar Jony (Lastra). Esta victoria vino muy bien para el equipo.
¿Conoce la Semana Coppi&Bartali, su próxima carrera? Tiene una etapa más, pero pienso que va a ser similar a la de hace dos años. Es una carrera que conozco bastante bien; es una carrera muy nerviosa y luego está la forma en que se corre en Italia. Estoy con ganas y hay que aprovechar este estado de forma. La carretera nos pondrá a cada uno en nuestro sitio. A pesar de coincidir con Catalunya, pienso que tenemos un equipo completo. Y nos tiene que dejar un estado de forma ideal para País Vasco y lo siguiente.
¿Cuál será su próximo calendario después de Italia? ¿Cuáles son sus aspiraciones? Induráin, País Vasco, Tour Alps, Vuelta a Madrid y Vuelta a Asturias. Está todo a la vuelta de la esquina, empezando por las carreras de casa que son las que marcamos porque son las nuestras y son importantes: tenemos la equis puesta en ellas. El objetivo es llegar lo mejor posible para afrontarlas con las máximas garantías. Es un calendario exigente, terreno que nos va y en teoría estando bien de forma no tiene que haber ninguna complicación. Se trata de seguir esta línea, con esta confianza, pensando en positivo para a partir de ahora tener una línea ascendente. Y luego Madrid y Asturias son carreras importantes para el equipo para buscar el resultado.
Es joven, pero acumula ya cuatro años de profesional. Cada ciclista lleva una evolución. La mía está siendo más pausada. Yo me centro en el día a día. Estos detalles de ahora sí es lo que buscaba, esa confirmación real porque capacidad sí que pienso que tengo para estar ahí. Estos detalles me hacían fata para confirmarme.
Disputó dos ediciones del Giro de Italia, ¿espera debutar en la Vuelta a España este 2019? Sí, claro. Es siempre una ambición siempre. Pero prefiero mirar a corto-medio plazo y dejarme los objetivos lejanos para cuando vayan llegando. El año pasado también tenía esperanza y al final no estuve en el equipo de la Vuelta. Personalmente, mi objetivo es llegar en las mejores condiciones y demostrar en cada carrera. Desde luego que Vuelta a España es el objetivo de la temporada, una grande. Hay que trabajar día a día para ganarse la confianza del equipo. Pienso que el camino que llevo es bueno.