La llegada a Gap es el preludio de la traca final alpina del Tour de Francia 2015 pero también sirve de paréntesis para que otro perfil de corredores, los más combativos, tengan una oportunidad para expresarse.
El marco teórico plantea dos ascensos de segunda categoría, entre ellos, el puerto de Manse, a 12 km de la meta que disuade a los sprinters de trazar planes con vistas a una llegada masiva. Falta por ver quiénes son esos perfiles combativos que capaces de conseguir que una escapada sobreviva hasta el final, maniobrando con sutileza para que una victoria de etapa de la fuga parezca una accidente.
En la configuración actual del pelotón todos los equipos parecen tener candidatos válidos, excepto el Team Sky que concentra todos sus esfuerzos en proteger el maillot amarillo de Chris Froome. Para evitar sorpresas se convertirán probablemente en un simple filtro de control de cara a la fuga, bloqueando el paso de todos aquellos que estén a menos de 20 minutos de Froomie en la general.
Esto no quita que la lista de aspirantes a la fuga siga siendo larga, pero el palmarés de las metas en Gap revela que no cualquiera es capaz de imponerse en sus llegadas. Rui Costa lo hizo en 2013 unas semanas antes de convertirse en Campeón del Mundo en Florencia y Thor Hushovd lucía el maillot arcoíris cuando ganó, dos años antes. Las ambiciones de Michal Kwiatkowski lo llevarán seguramente a volver a probar suerte. De momento lleva dos Premios a la Combatividad…pero no parece que eso sea suficiente para saciar el apetito del vigente campeón del mundo.
Etapa dura, previa a la segunda jornada de descanso que nos llevará a los Alpes donde se conocerá el destino del Tour de Francia 2015.
fuente: letour.es
