- Tras un portentoso sprint, el velocista del UAE Emirates Fernado Gaviria impone su ley en la recta de llegada y se enfunda, gracias a las bonificaciones y el ‘puestómetro’, el jersey de líder
- Es la sexta victoria de etapa de Gaviria desde que la Vuelta a San Juan es internacional, ya que ganó dos etapas en 2017, una en 2018 y dos en 2019
- Mañana se disputa una contrarreloj de 15,2 km que va a clarificar la clasificación general a la espera de que el Alto Colorado dicte la sentencia definitiva
Tras la sorprendente victoria de Rudy Barbier (Israel) en la primera etapa, las aguas han vuelto a su cauce en la Vuelta a San Juan con el triunfo de Fernando Gaviria (UAE Emirates) en la segunda. No es que el francés no mereciera el éxito el primer día, todo lo contrario, ya que fue el más fuerte, sino que no era normal que Gaviria solo ocupase la novena posición cuando en las tres ediciones precedentes había sido siempre él el ganador de la primera jornada.
Este año no ha sido a la primera, pero sí a la segunda. Y hoy, en ausencia de caídas y otros problemas en los kilómetros finales, se ha tomado la revancha, levantando los brazos en la meta de Pocito, donde ya había ganado en 2018 y 2019. La victoria es el resultado del trabajo que el equipo UAE Emirates ha realizado este invierno y, muy especialmente, en la concentración que en diciembre llevaron a cabo en Benidorm (España).
Allí, los técnicos del conjunto árabe, con Joxean Fernández Matxin a la cabeza, trabajaron las llegadas masivas con dos grupos bien diferenciados: el de Gaviria y el de Kristoff, el otro sprinter de la formación. La llegada de Maximiliano Richeze al UAE Emirates obligaba a algunas correcciones en el ‘treno’ del colombiano y es lo que hicieron en Benidorm, señalando a McNulty, Troia, Molano y Richeze como lanzadores de Gaviria. Aún falta engrasar la maquinaria, pero entre todos han conseguido que, pese a la caída de Richeze, el colombiano levante los brazos tras un soberbio final.
Aquí puedes ver la etapa completa:
Es su sexta victoria parcial en la Vuelta a San Juan desde que la prueba es internacional, ya que ganó dos etapas en 2017, una en 2018 y también dos en 2019. Este año ya lleva una… Y no será probablemente la última. Gracias a las bonificaciones y el ‘puestómetro’, también es el nuevo líder de la carrera. La remontada de hoy, saliendo desde atrás, lo merece.
Las aguas también han vuelto a su cauce en la Vuelta a San Juan tras la decisión del Jurado Técnico de dar el tiempo del ganador a todos aquellos que se vieron involucrados en la caída que se produjo a 3,4 km de la línea de llegada de ayer. Alaphilippe, Evenepoel, Sevilla y Sepúlveda, entre muchos otros, así como sus equipos, han respirado tranquilos al saber que siguen con sus opciones intactas.
La etapa, además de por el sprint, ha estado marcada por la escapada de ocho corredores: Francisco Monte (Argentina), Leandro Velardez (Fátima), Daniel Juárez (Fártima), Royner Navarro (Perú), Hugo Ruiz (Perú), Robin Carpenter (Rally), Iker Ballarin (Euskadi) y Christopher Jurado (Panamá), quienes han obligado al pelotón a emplearse a fondo por detrás, especialmente Jurado y Carpenter.
La crono de mañana
Mañana se disputa la decisiva etapa contrarreloj, quizás la más importante de la Vuelta, más incluso que la del Alto Colorado. Serán 15,2 km que, a diferencia de otros años, no son completamente llanos, ya que en la parte final se asciende al Dique de Punta Negra, en cuya explanada, en el mismo escenario en el que ganó Alaphilippe en 2019, estará situada la línea de meta.
Puesto que es una zona en la que habitualmente sopla el viento, también habrá que tener en cuenta este elemento. Además, cambia frecuentemente de dirección, luego podría beneficiar a unos y perjudicar a otros, en función de la hora de salida.
Respecto al tipo de bicicleta a emplear, el reglamento de la carrera es claro en su artículo 13: “La bicicleta de ruta es la única autorizada. Esta podrá llevar rueda lenticular”, lo que quiere decir que las ‘cabras’ están prohibidas. El objetivo es igualar a los contendientes, ya que hay equipos que no disponen de bicicletas especiales y, además, para los equipos europeos es problemático saltar el Atlántico con tanto material.
El año pasado, en una crono un poco más corta, de 12 km prácticamente llanos, Alaphilippe logró su segundo triunfo de etapa consecutivo, al rodar a 52,619 km/h. El francés aventajó en 12 segundos a Conti y Evenepoel, en 16 a Grosschartner y Anacona, a la poste el ganador final, en 31 a Óscar Sevilla y, entre otros, en 38 a Nairo Quintana.
Como dice Sepúlveda, el corredor del Movistar, la clave de la Vuelta a San Juan es “hacer una buena contrarreloj y defenderse después bien en el Alto Colorado, sin perder tiempo en las demás etapas”. Qué fácil parece y qué difícil es lograrlo.
Además de Alaphilippe, quien en 2019 ha demostrado en sobradas ocasiones de lo que es capaz en cualquier terreno y disciplina, su compañero Remco Evenepoel cuenta también entre los favoritos. Pese a su juventud, es el actual campeón de Europa de la especialidad y el subcampeón del Mundo.
También cuentan en los pronósticos el italiano Filippo Ganna, tres veces campeón del Mundo de persecución individual y medalla de bronce en el último Mundial de contrarreloj en ruta, Maciej Bodnar, Tom Bohli, Nelson Oliveira y Brandon McNulty, además de los argentinos Eduardo Sepúlveda, Rubén Ramos, Juan Pablo Dotti y Laureano Rosas.
SEGUNDA ETAPA
Recorrido: Pocito-Pocito, de 168,7 km a 48,177 Km/h
Tiempo: Soleado. 33º
Primero: Fernando Gaviria (UAE)
Segundo: Nicolás Naranjo (Fátima)
Tercero: Marco Benfatto (Bardiani)
ASÍ VA LA GENERAL
Primero: Fernando Gaviria (UAE Emirates)
Segundo: Rudy Barbier (Israel)
Tercero: Manuel Belletti (Androni)
Así lo vivió FERNANDO GAVIRIA (EMIRATES): “Ha sido un día complicado, porque se ha ido a un ritmo que no era rápido, pero tampoco lento. No sabía cómo iban a responder las piernas. Al final no hemos podido contar con Max (Richeze), porque ha sufrido una caída, y me han ayudado Brandon (McNulty) y Oli (Troia), ya que Bohli había tirado mucho. Me han llevado a la posición adecuada. Iba a rueda de Peter Sagan y tenía a Álvaro Hodeg a mi lado, les tenía controlados. Cuando he decidido partir, he tenido las fuerzas necesarias para llegar a la meta”.