Tejay van Garderen (BMC) ha sido el vencedor de la cuarta etapa de la Volta a Catalunya, acabada bajo una intensa nevada a la estación de esquí de Vallter 2000. El norteamericano, de 26 años, ha llegado destacado junto al francés Romain Bardet, pero tan sólo han sacado unos segundos a Alberto Contador y Joaquim Rodríguez. De este modo, Purito continúa líder de la clasificación general con un margen estrecho después de superar las dos etapas de los Pirineos.
Justamente el equipo del catalán, el Katusha, ha sido el que ha llevado el peso de la jornada, controlando al pelotón en los primeros kilómetros de la collada de Tosses, el primer puerto de la etapa, hasta que se ha consolidado la escapada formada por Rubén Plaza (Movistar), Thomas De Gendt (Omega Pharma-Quick Step), Maxime Mederel (Europcar) y Stef Clement (Belkin). Entonces el sol lucía, haciendo más agradable el esfuerzo de los ciclistas, a diferencia de lo que ha pasado en el último tercio de la etapa.
Una vez la escapada se ha mantenido en una distancia entre los tres y los cuatro minutos respecto al gran grupo, nada ha cambiado en el guion de la etapa hasta la llegada del alto de Oix (1a categoría), donde equipos importantes como Garmin-Sharp y Sky han probado de colocar ciclistas en la cabeza de carrera. A pesar de eso, los ataques de Janier Acevedo y Kanstantsin Siutsou, respectivamente, han sido neutralizados con relativa facilidad.
En el exigente ascenso al alto de Rocabruna, el fuerte ritmo del equipo Tinkoff-Saxo ha propiciado el acercamiento hasta los escapados hasta cerca de un minuto. Esta circunstancia ha sido aprovechada por el colombiano José Serpa (Lampre-Merida), que en el terreno ascendente posterior al paso por el puerto de montaña se ha escapado hasta llegar al grupo cabecero. Cuando Serpa ha llegado, sólo quedaban Plaza y el siempre atrevido De Gendt, que se ha hundido después de un intento en solitario antes de empezar el ascenso final a Vallter 2000.
Con todo, el fuerte ritmo de un grupo cada vez más reducido y comandado por el equipo Sky en la primera mitad de puerto, ha neutralizado la escapada y ha dejado la resolución de la etapa en manos de los que se disputaban la clasificación general, que se han vigilado bastante en los últimos kilómetros. Después de neutralizar intentos como los de Pierre Rolland (Europcar) y el joven George Bennett (Cannondale), en los primeros kilómetros, las hostilidades entre los grandes se han visto en los últimos dos kilómetros.
El prometedor francés Warren Barguil (Giant-Shimano), doble vencedor de etapa al pase Vuelta en España, era cabeza de carrera cuando de nuevo Chris Froome (Sky) se ha decidido a destapar la caja de los truenos. El británico, que ha vuelto a ceder unos segundos, ha sufrido la réplica de Alberto Contador (Saxo-Tinkoff), que aún así no ha tenido la continuidad que tuvo el ataque de ayer de Joaquim Rodríguez y ha provocado la vigilancia entre los favoritos.
Este marcaje lo ha aprovechado van Garderen para coger unos metros en el último kilómetro junto con Romain Bardet (Ag2r La Mondiale) y se ha impuesto a la meta de Vallter 2000, hecho que lo coloca en la tercera posición a la general detrás de Purito y Contador. Con todo, las diferencias son tan pequeñas (28 segundos entre los 8 primeros de la general) que cualquier cosa puede pasar de ahora en adelante, especialmente al circuito final del último día en Montjuic.
Hoy, la más larga de las etapas de esta edición, con 218,2 kms entre Llanars y Valls, que contará con la trampa del alto de Lilla (2ª categoría) en los últimos diez kilómetros para poder sorprender.