Nuevo asalto en la Copa del Mundo de ciclocross para Kevin Suárez, cuyo mes de Noviembre no está siendo para nada satisfactorio para él, por unas circunstancias u otras. La localidad alemana de Zeven acoge este sábado la quinta manga del torneo UCI, y el cántabro buscará resarcirse de los resultados anteriores y, al menos, acercarse a la versión que mostró hace unas semanas en Koksijde.
Comenzó la semana “haciendo borrón y cuenta nueva tras Bogense. El lunes cambié el chip totalmente. He aprovechado el buen tiempo que ha hecho estos días en Cantabria para meter horas de entrenamiento, que era lo que tenía planeado. Lo he podido aprovechar bien, pensando sobre todo en el próximo mes de Enero“, afirma Suárez. Durante estos entrenamientos “la verdad que me he sentido bastante sorprendido por cómo me he encontrado físicamente –prosigue-, porque tras ver la sensaciones de Dinamarca no las tenía todas conmigo. Trabajando me he encontrado muy bien y ahora toca ver si esas sensaciones se cumplen el sábado en Zeven“.
Esta prueba se incluyó ya en 2016 dentro del calendario de la Copa del Mundo y esta campaña repite. En aquella ocasión el corredor de Bioracer-Nesta-MMR se clasificó 32o, a 4:14 del ganador, el neerlandés Mathieu Van der Poel: “Es un circuito que ya conozco del año pasado. Tiene un poco de todo. A pesar de ser bastante técnico, en 2016 estuvo bastante rápido“, recuerda.
“Sin embargo, por lo que he podido ver en fotos, va a estar algo embarrado. De todas maneras, hasta que hoy no lo vea entrenando no saldremos de dudas. A mí
particularmente es un trazado que me gusta –aclara Kevin-. Tiene tanto zonas técnicas como tramos con buenas rectas para abrir gas“.
Sobre objetivos en Alemania lo tiene claro: “El año pasado hice un resultado decente. Esta vez, como decía la semana anterior, todo lo que sea mejorar el resultado de
Koksijde (30o, N del A) sería algo muy bueno. Pero viendo como me encontré en Bogense, lo que pretendo ahora es buscar buenas sensaciones e intentar acabar
satisfecho. Simplemente“.
