Kim Kirchen repite victoria. Contador y Herrero en el podio

David Herrero no se ha bajado un sólo día del podio en la Vuelta al País Vasco. El ciclista del Karpin Galicia repitió en Vitoria, final de la cuarta etapa, el tercer puesto que ya había conseguido en las dos primeras, por detrás de los corredores del Highroad Kim Kirchen y Morris Possoni; y un día después de haber dado al equipo gallego la primera victoria de la temporada. Herrero mantiene también desde el primer día su privilegiada tercera posición en la general, por detrás de su compañero de equipo Ezequiel Mosquera, segundo, y del líder de la prueba, Alberto Contador (Astana). El y Mayoz mantienen se mantienen también al frente de las clasificaciones de la regularidad y de la montaña. La Vuelta al País Vasco vivió su jornada más tranquila en el recorrido de 162 kilómetros entre Viana y Vitoria. Superada la media hora de carrera se marcharon cinco corredores: Tom Stubbe (Française Des Jeux), Dario Cataldo (Liquigas), Matthew Lloyd (Silence-Lotto), Amets Txurruka (Euskaltel-Euskadi) y Morris Possoni (High Road). El pelotón les permitió conseguir una ventaja máxima de 3-25 y con esa renta los tres últimos lograron mantener viva la fuga hasta un metro y medio antes de meta, que fue el momento en el que Kirchen, apretado por David Herrero, superó a su compañero de equipo Possoni, arrebatándole una victoria que éste se había trabajado durante 140 kilómetros. El pelotón, comandado por el equipo Astana, dio mucha vida a los fugados que parecían cazados a treinta kilómetros de meta. Pero el ritmo del equipo del líder no buscaba la neutralización, sino mantener a los escapados a una distancia prudencial, y con la ausencia de Bettini, retirado tras una caída, en el puerto de La Herrera, ninguna escuadra quiso asumir claramente la responsabilidad de la neutralización. Amagos de unos y de otros, con los hombres del Karpin Galicia muy atentos en cabeza en la fase final de la carrera, para llegarse al último kilómetro con el trío de cabeza con 12 segundos de ventaja sobre el pelotón. La diferencia de los fugados parecía suficiente, pero entre ellos empezaron a surgir también las desconfianzas. Aun así, tenían margen para ganar, pero a ciento cincuenta metros arrancó David Herrero, con Kirchem muy atento a su rueda. El ciclista del Karpin Galicia arrastró al luxemburgués hasta los escapados, para anotarse su segunda victoria en la vuelta. Herrero superó también a todos los fugados menos a Possoni e hizo tercero. La quinta etapa entre Vitoria y Orio, sobre 162 kilómetros, se presente muy interesante, con el puerto de Aia, a catorce quilómetros de meta, corto pero con desniveles que superan el veinte por ciento, y otros repechos duros posteriores, que apartarán a algunos corredores de la victoria en la vuelta antes de la contrarreloj final del sábado.