La Supercaliber de Jolanda Neff incorpora ilustraciones inspiradas en grabados en madera japoneses.
Jolanda Neff quería que su bicicleta para el Campeonato del Mundo, que se celebraría en Val di Sole, invocara la tranquilidad del país nipón: la niebla en la montaña, el bambú y los cielos etéreos. Katy Steudel, diseñadora de bicicletas de montaña de Trek, tomó nota de las sugerencias de la campeona olímpica y empezó a trabajar.
«Observé las formas de arte japonesas, prepare algunos bocetos y Jolanda eligió y partimos de ese punto», explica Steudel. «Sabía lo que íbamos a hacer, pero retocamos el diseño después de que ella lo viera y, además, los colores de los bocetos cambian completamente cuando los ves en vivo y en directo.. Iba a ser una grata sorpresa».
Diseñar la Supercaliber de Jolanda Neff para el Campeonato del Mundo disparó la creatividad de Steudel. «Si bien las bicicletas de serie tienen un límite de tiempo para la pintura, además de un presupuesto al que ceñirse, nos dieron rienda suelta para el diseño. El tiempo seguía siendo fundamental, dado que queríamos presentar la bicicleta en Val di Sole», explica Steudel, «pero pudimos dedicar el triple de tiempo y mano de obra para perfeccionar el diseño y la pintura en comparación con nuestras bicicletas típicas de Project One. Acabamos dedicando la misma atención al detalle en el diseño de la pintura que dedicamos a nuestras bicicletas de P1 Ultimate».
Steudel dedicó horas al concepto y al diseño de la Supercaliber de Neff y colaboró con el pintor Kyle Doney, que tiene un don para el diseño y posee una amplia experiencia y conocimiento en pintura, para hacer realidad sus ideas. Doney, otro diseñador, trabajó codo con codo con Steudel, aportando multitud de nuevas ideas y ayudando a perfeccionar las técnicas para sombrear las nubes que trascienden desde la niebla oscura y susurrante a través del bosque de bambú en la parte inferior de la bicicleta, hasta cúmulos de aire y brillantes. bocanadas a medida que avanza hacia el cielo cromático.
Steudel dice que querían que hubiera mucho oro en la bicicleta, «pero sin pasarse». Ciertamente llama la atención, pero sin abrumar. Según Steudel: «Yo diría que el diseño es refinado, pero sigue siendo divertido y festivo con las nubes estilizadas, los colores brillantes y el patrón de bambú ruidoso».
El trabajo de pintura requirió un esfuerzo grupal entre Steudel y varios otros diseñadores de producto y pintores de Project One. Fue un trabajo arduo lograr que todos los detalles fueran perfectos para una de las atletas más condecoradas y queridas del Trek Factory Racing.
