Javier Ruiz de Larrinaga (MMR-Spiuk) inicia esta semana su fase de recuperación activa antes de tomarse unas merecidas vacaciones después de un invierno cargado de emociones. El tres veces campeón de España de ciclocross reconoce que “no ha sido una temporada buena. No podemos, sin embargo, echarnos toda la culpa a nosotros. Ha sido un año difícil desde el principio. La caída en Julio lo condicionó todo. Fui capaz de llegar bien a inicio de temporada, pero los 27 días en que estuve sin hacer nada pasaron factura para que en noviembre y diciembre no pudiese estar a la altura. En este último mes de enero me encontrado bien, no como me hubiese gustado pero bien”.
Larrinaga cierra esta campaña de cross con un balance menos provechoso que el de otros años: sólo dos victorias, las obtenidas en el MMR CXperience de Ibias-Degaña y el Campeonato de Asturias en Villaviciosa, con los podios internacionales en Karrantza (2º), Villarcayo y Medina de Pomar (3º), así como la medalla de bronce en el Campeonato de Euskadi, como otros resultados reseñables en medio de los continuos sinsabores. “Aunque yo sea un corredor que aguanta bien la presión, todos los problemas que he tenido -la caída en Koksijde, las enfermedades- te pasan factura. Lo que me condiciona más como corredor no es no ganar o no tener resultados: es no encontrarme a gusto. Si me encuentro bien y mis rivales son superiores, como ha sucedido en algunas carreras, más no se puede hacer”.
El corredor de Amezaga, que estará esta semana en la presentación del equipo de ruta Lizarte dirigido por Manolo Azcona, deja la temporada con la sensación de no haber podido cumplir la misión que él mismo se había encomendado para este invierno: destacar en la escena internacional y compaginar dicho desempeño con buenas actuaciones en las pruebas españolas. “Aun así, en carreras de Copa del Mundo, sin estar bien físicamente, igual he dado mejor nivel de lo que he dado aquí en ese mismo estado físico. No puedo decir que terminar en el top-40 sea dar buen nivel, pero sí que creo haber corrido mucho más relajado, que me voy encontrando en mi sitio en las carreras y que voy progresando en muchos aspectos técnicos”, señala un Larrinaga que espera en la campaña 2012-2013 “seguir realizando esa apuesta. Este año la pude hacer; no me salió bien porque no he estado fuerte, pero he aprendido a hacer las cosas de un modo mejor, asumiendo menos gasto”.
Para esa próxima aventura en el extranjero, para la que Larrinaga ya ha recibido el apoyo “tanto de MMR como de Spiuk, que van a continuar como antes y que han confiado en mí en todos estos años”, el objetivo del zuyano será “ante todo, terminar el año entre los 50 mejores del ránking UCI, lo que me aseguraría con bastante certeza una plaza para el Mundial de Louisville (Estados Unidos), para el que probablemente se puedan desplazar menos españoles. Por lo demás, quiero un año sin problemas, sin lesiones, en el que poder disfrutar el calendario que he tenido este año, pero a otro nivel competitivo. Voy a prepararme lo mejor posible, sin dejar de crecer. Creo que no tengo que demostrar nada a nadie, pero quiero seguir trabajando para hacerlo bien y que el ciclocross siga yendo hacia arriba”.
