Los 10000 del Soplao es un evento que trasciende a lo meramente deportivo para abarcar otros muchos aspectos de la vida de las personas que participan en la prueba. Cada año se abre un espacio nuevo para la participación, la superación de metas y la consecución de nuevos retos personales.
“El Soplao” es cada día más global, más plural y más sensible hacia todo lo que forma parte del medio en el que se desarrollan sus diferentes modalidades deportivas. Desde hace años se viene observando la necesidad de incrementar las actuaciones orientadas a preservar el entorno y a conseguir que la huella ecológica que deja cada edición del Soplao sea cada vez menor.
El año pasado se puso en marcha una iniciativa dirigida a la recogida selectiva de latas de aluminio. Bajo el eslogan “DANOS LA LATA”se impulsaron medidas dirigidas a recoger, en los avituallamientos, el mayor número de latas de aluminio. La finalidad no era otra que intentar seleccionar una parte de los residuos para, posteriormente, poder ser reciclados.
Dando un paso más en este tipo de iniciativas, para este año se pondrá en marcha la campaña “HAY QUE DARLO TODO”. Esta expresión, utilizada muchas veces en el contexto de algunas actividades deportivas a la hora de pedir a cada participante el máximo de entrega y esfuerzo, va a ser la que presida la iniciativa de intentar recoger el máximo de “basura”, en los espacios habilitados al efecto, y así evitar su dispersión por los distintos itinerarios que recorre la prueba.
Cada día son más, y mayores, las dificultades que hay que vencer para poder organizar las diferentes modalidades deportivas de los 10000 del Soplao. La conservación de los espacios naturales que recorre la prueba y la repercusión que el paso de los participantes tiene sobre los mismos, son dos aspectos que nos tienen que hacer pensar en la necesidad de proponer medidas de actuación dirigidas a conservar el medio y a reducir los efectos de la acción humana sobre el mismo antes, durante y después de terminar las pruebas.
Por tanto, es tarea de todos, desde los organizadores hasta el último de los participantes, pasando por todas las personas que siguen las diferentes pruebas, contribuir a dejar el entorno un poco mejor de como lo encontramos.
Todo lo que seamos capaces de hacer en este sentido servirá para facilitar la pervivencia de los 10000 del Soplao, a la vez que estaremos mostrando modelos de actuación sostenible, tan necesarios para las generaciones que nos seguirán. Sin duda, con gestos muy sencillos estaremos haciendo una gran labor educativa.
Así pues, vamos a hacer un esfuerzo por ir dejando nuestra basura en los puntos que la organización dejará a lo largo del recorrido, debidamente señalizados y acondicionados para recibir todo aquello que queráis dejarnos.
Ya lo sabéis, este año ¡HAY QUE DARLO TODO!