Rapidísima jornada -tres horas y media escasas para 153 km entre Camaiore y Cascina- la que ha vivido el pelotón de la Tirreno-Adriático en su segundo día de competición, un jueves que comenzó con sonrisas para Movistar Team en la figura de Adriano Malori y acabó con tensión, aunque sin incidentes.
El italiano conserva la Maglia Azzurra de primer clasificado tras invertir buena parte del día trabajando junto a los Ventoso, Castroviejo o Amador para proteger a Nairo Quintana, camino de las etapas de montaña del sábado y domingo, y evitó por fortuna las dos duras caídas -una de ellas a menos de 200 metros de la línea de meta- que rompieron el grupo antes del sprint.
Debusschere (LTB) se hacía con el éxito parcial por delante de Sagan (TCS), al que los 6” de bonificación por la 2ª plaza le llevaban a empatar con Malori, pero no superarle, debido al triunfo de etapa de Adriano en la jornada de ayer. El de Traversetolo lucirá así el liderato 24 horas más, camino de otro probable sprint mañana camino de Arezzo (203 km).
Así lo vivió el líder: “Feliz de mantener por segundo día este maillot de líder, más en un día tan complicado. La tensión ha sido máxima en los últimos 70 km; se ha levantado viento y hemos empezado a ‘limar’, buscando los huecos en cabeza, muy lejos de la llegada. Eso ha añadido mucho estrés y es normal que en este tipo de carreteras, donde seguramente no quepan doscientos corredores juntos, sucedan caídas como las de hoy. Por suerte pudimos evitarlas todas y Nairo ha pasado sin problema, así que todo sigue bien.
Mañana creo que Sagan, Cancellara o el propio Van Avermaet, en un repecho así, tienen todas las opciones para quitarme el maillot. Aun así, una victoria de etapa y dos días como líder ya es un balance fantástico; veremos si se puede añadir otro buen resultado el martes que viene”.