Las zapatillas de ciclismo son elementos que no deben faltar en el equipamiento de cualquier amante de la bicicletas sin importar la disciplina que desarrolle. En este sentido cabe destacar que, actualmente, existe una gran variedad de modelos específicamente diseñados para cada una de ellas. Todos ellos, evidentemente, reúnen una serie de características propias que hace que sean ideales para un cometido u otro.
Pero, ¿por qué no son recomendables las zapatillas tradicionales para montar en bicicleta? Para contestar a esta pregunta, lo primero que hay que decir es que las zapatillas normales no están diseñadas para este propósito, pues al caminar o al correr no se ejerce la misma presión sobre cada zona del pie que cuando se monta en bicicleta y, por ello, es frecuente que, aquellos que las utilicen, sufran de dolor o adormeciento en sus extremidades.
Por su parte, en términos de rendimiento, es necesario comentar que las zapatillas de ciclismo, al contar con suelas más rígidas, posibilitan una mejor transferencia de energía entre el pie y el pedal, lo cual se traduce en la capacidad de mover un desarrollo de mayor tamaño. Además, dichas suelas también ofrecen el apoyo suficiente como para prevenir la aparición de la fatiga muscular y, con ella, de los temidos calambres. Por si fuese poco, sujetan perfectamente el pie y se adaptan a él de una manera realmente eficiente.
Ahora sí, vamos a ver cuáles son los principales tipos de zapatillas de ciclismo que podemos encontrar en tiendas especializadas como bikester.es:
1. Zapatillas ciclismo de carretera
Las zapatillas de ciclismo de carretera, por lo general, están diseñadas para ser usadas con pedales automáticos dotados de sistemas clipless . Se distinguen de otros tipos porque poseen suelas muy rígidas que hacen posible transmitir mayor potencia en cada pedalada y, así, poder mover un desarrollo de más tamaño y avanzar a gran velocidad. Su incapacidad para flexionarse y la falta de tracción que posee la suela evitan que se pueda caminar mucho tiempo con ellas. Spiuk, Sidi, Shimano y Northwave son las marcas más reputadas en la fabricación de este tipo de calzado.
Por lo general, las zapatillas de ciclismo de carretera ofrecen una buena ventilación y están construidas a partir de materiales sintéticos realmente ligeros y muy resistentes. De hecho, aquellas de gama más alta suelen estar fabricadas a partir de fibra de carbono y disponen de sistemas de ajuste al pie que favorecen el máximo grado de personalización y adaptación. Es importante recalcar que cada modelo se elabora para un tipo de pedal determinado, por lo que hay que tener este hecho en cuenta antes de decantarse por uno en concreto.
2. Zapatillas para ciclismo de montaña
La suela de estas zapatillas es bastante dura, pero no tanto como en el caso de las de carretera. Su principal cometido es el de permitir una cadencia de pedaleo eficiente y, a la vez, proporcionar la suficiente flexibilidad como para andar sobre superficies rugosas y accidentadas. Por ello, además, incluyen una zona de goma. El sistema de cierre está compuesto por una serie de cordones, de ganchos y de lazos con el fin de que el calzado se ajuste a la forma del pie y proteja los dedos.
Los modelos más exclusivos que, en la actualidad, se pueden encontrar en el mercado están confeccionados a partir de materiales sintéticos realmente ligeros e incluyen algunas funcionalidades adicionales. Por ejemplo, es frecuente que dichos materiales incluyan una capa impermeable para evitar que el agua de la lluvia llegue a entrar en contacto con el pie o que se incluyan protecciones en las zonas de los tobillos. B twin, Mavic y Bontrager son las tres marcas especializadas en zapatillas para ciclismo de montaña más reputadas.
De forma estandarizada, las zapatillas de ciclismo de montaña utilizan un sistema de tacos de dos agujeros. Por esta razón, es importante que el usuario se asegure, antes de hacerse con unas, de que sus pedales son compatibles con ellas. Asimismo, también conviene destacar que los modelos con suelas planas, es decir, sin sistemas de tacos, están cada vez más de moda.
3. Zapatillas de ciclismo casuales
Utilizamos la expresión casuales para referirnos a todas aquellas zapatillas de ciclismo pensadas para aquellas personas que, a pesar de practicar ninguna disciplina en concreto, toman la bicicleta habitualmente para ir al trabajo o a cualquier otro lugar y les gusta ir protegidos y cómodos. En este sentido, se caracterizan por ser muy ligeras y por adaptarse prácticamente a cualquier tipo de pedal. Además, permiten caminar sin grandes dificultades e, incluso, algunos modelos tienen un diseño similar a unas sandalias. También son denominadas híbridas. Muchas son las marcas que desarrollan este tipo de calzado.
4. Zapatillas de triatlón
La segunda de las tres exigentes pruebas de las que consta el triatlón es el ciclismo. A pesar de que, en apariencia y en prestaciones, estas zapatillas de ciclismo son muy similares a las utilizadas en la modalidad de carretera, lo cierto es que cuentan con una serie de especificidades asociadas a la disciplina deportiva para la que han sido creadas. En concreto, cuentan con un sistema de cierre muy rápido que permiten al usuario desprenderse de ellas en un santiamén y poder seguir su marcha una vez acabe la pruebe y llegue el turno del atletismo. Además, el mecanismo de fijación al pedal es de velcro. DHB, Sidi y Bont son marcas especializadas en esta parcela.
5. Zapatillas de ciclismo indoor
Muchas personas, por una cuestión o por otra, no pueden salir a la calle con su bicicleta y, por ello, optan por practicar spinning o, simplemente, ponerse en forma con su bicicleta estática. Asimismo, muchos ciclistas experimentados se suben a este tipo de bicicletas con el propósito de mejorar determinados parámetros de su rendimiento. Es por ello que, actualmente, existen zapatillas de ciclismo indoor con unas características específicas.
Este es el tipo de calzado para montar en bici más flexible que existe ya que también debe hacer posible caminar con él cómodamente. Además, puesto que muchas personas continúan con otros ejercicios después de terminar su clase spinning o su sesión de bicicleta estática, ha de adaptarse como cualquier otra zapatilla a otras disciplinas. Sin embargo, no son aptas ni recomendables para triatlón ni para el ciclismo de montaña o carretera.
En definitiva, estos son los principales tipos de zapatillas de ciclismo que existen en estos momentos en el mercado. En cualquier caso, todas ellas brindan la máxima dosis de confort y protección de cara a practicar la disciplina para la que están diseñadas. Por ello, si quiere ascender al siguiente nivel a la hora de montar en bici, no dude en hacerse con un modelo de aquellas que mejor satisfagan sus necesidades.