El corredor del Team Sky Mikel Landa se vió obligado ayer a decir adios al Giro de Italia 2016 cuando se encontraba situado en el grupo de favoritos a la victoria final.
El ciclista alavés se sintió mal a lo largo de la noche anterior. Mikel sufría de problemas estomacales pero durante la mañana parecía sentirse mejor y nada hacia presagiar que se tendría que retirar.
Sin embargo durante la etapa las molestias se volvieron dolor y el líder del Sky no pudo hacer otra cosa que retirarse de la carrera. "me siento muy disgustado, no solo porque estaba en un buen momento sino por todo el trabajo que había hecho para llegar aquí en buena forma."
Landa quiso agradecer el apoyo recibido por los miembros de su equipo y espera regresar pronto con nuevos objetivos.