En el Mundial más especial, el de casa, el de Ponferrada 2014, Movistar Team ha vuelto a cumplir en una especialidad en la que se ha convertido en uno de los referentes internacionales. La escuadra española ha sido sexta en los Campeonatos del Mundo de la modalidad disputados en la localidad leonesa sobre un recorrido de 57 kilómetros en el que el conjunto americano BMC se ha llevado el triunfo con 31 segundos sobre el belga Omega Pharma-Quick Step –ganador de las dos ediciones anteriores– y 35 respecto al australiano Orica. En cuanto al otro equipo español, el Caja Rural, terminaba en el puesto 23, a 4-29.
Los hombres del BMC Racing Team, liderados por Tejay van Garderen, se resarcieron del mal sabor de boca de hace dos años, cuando se quedaron a tan sólo 81 centésimas del preciado metal. Esta vez no se les ha escapado el oro, imponiéndose en los 57,12 km por 31” a los australianos del Orica GreenEdge, que doblaban con el podio de la prueba femenina.
Aunque su sexta posición repite la plaza lograda hace dos años en la primera edición del Mundial de la especialidad, Movistar Team se ha quedado a sólo 51 segundos del vencedor y a apenas 20 y 16 segundos, respectivamente de las medallas de plata y bronce –en 2012 le separaron 1 17 y 31 de ambos metales–. Tras el décimo puesto conseguido el pasado año en el Mundial de Florencia, la progresión del equipo telefónica resulta notoria, más si cabe con la juventud del bloque presentado hoy, donde sólo Erviti ha cumplido los 30 años: Amador (28); Malori (26), Dowsett e Izagirre (25) y Sütterlin, el único que hoy perdió contacto con sus compañeros mediado el recorrido, 21 años.
"El puesto es el que da valor –explicaba Eusebio Unzué-, pero hay una lectura muy positiva, que es la de que nos hemos quedado a 20 segundos de la plata cuando el año pasado estábamos a más de dos minutos y hace dos, a minutos y medio. Es la muestra de que la progresión del equipo cada año en esta disciplina es importantísima. Lógicamente, quienes nos han precedido son grandes especialistas y con ciclistas en magnífica forma. Estoy satisfecho más con el tiempo perdido que con la posición. Sabíamos que era difícil, pero creíamos que podíamos estar entre los cinco primeros y, aunque hemos estado a punto, nos quedamos con ese dato de habernos quedado tan cerca de la plata. Vamos construyendo un bloque muy fuerte para la especialidad, con un bloque joven con gente como Sütterlin, que pese a que hoy ha podido pagar su inexperiencia, ha hecho muy bien los primeros 25 kilómetros y eso es algo importante para el futuro”.
En cuanto a la prueba femenina, las americanas del Specialized-lululemon volaron en los 36,15 km de la contrarreloj por equipos para hacerse con su tercer oro consecutivo en unos Mundiales. A pesar de los nervios previos a la carrera tras la caída sufrida ayer en los entrenamientos, las chicas de Ronny Lauke volaron a una media de 49km/h, pulverizando cada tiempo en los pasos intermedios. Al Olimpo de las nuevas diosas entraron junto a las australianas del Orica-AIS (+1’17”), que consiguieron su segunda plata en un Mundial, y las italianas del Astana (+2’19”), que dieron la sorpresa al colarse en el tercer cajón en su primera participación en un Mundial.
La cruz de la crono femenina fue para Rabo-Liv, que recordará Ponferrada como un mundial aciago. Cuando parecía que no podía escapársele la medalla de plata, la holandesa Annemiek van Vleuten chocó contra una valla provocando la caída masiva de las cuatro componentes que restaban en la CRE. Van Vleuten fue ingresada en observación en el hospital, así como su compatriota Anna van der Breggen, cuyo equipo ha confirmado que sufre una factura de pelvis.