Después del éxito logrado en las dos competiciones del último fin de semana –etapa (Jesús Herrada) y triunfo absoluto (Intxausti) en Asturias y podio final (Rui Costa) en Romandía-, Eusebio Unzué ya ha decidido el nueve que finalmente representará al Movistar Team en el 95º Giro de Italia que se iniciará el sábado en tierras danesas.
La escuadra telefónica, que dirigirán José Luis Arrieta y José Luis Jaimerena, estará compuesta por los españoles José Herrada, Beñat Intxausti, Pablo Lastras, Sergio Pardilla y Fran Ventoso; el costarricense Andrey Amador, el bielorruso Branislau Samoilau y los italianos Marzio Bruseghin y Giovanni Visconti.
DECLARACIONES Eusebio Unzué: “Creo que llegamos con un bloque muy competitivo. Es cierto que no contamos con un jefe de filas claro, con un hombre que en principio sea favorito para el podio, pero sí con gente con calidad y en forma como Intxausti o Pardilla, que si están bien pueden estar arriba. Creo que ha llegado su hora y que están preparados para luchar por la general. La victoria de Beñat en Asturias tiene que disparar su autoestima y le permite confirmar que está en un gran estado de forma.
Ventoso también estoy convencido que va a estar al nivel del año pasado y volverá a pelear por ganar en los sprints, lo mismo que Visconti ha demostrado que puede hacer en cualquier terreno. Tenemos gente experta, toda una garantía como Lastras o Bruseghin que ya saben lo que es ganar en el Giro y que serán los encargados de conducir al equipo en carrera. Y de Herrada, Samoilau o Amador espero que estén al nivel que han mostrado este año porque son gente que en cualquier jornada nos puede dar una alegría y ganar una etapa, que es un poco el objetivo inicial con el que vamos. El año pasado conseguimos dos y, aunque es muy difícil, intentaremos repetirlo.
Por primera vez en mis muchos años de director, he tenido muchisimas dudas porque los diez nombres que barajábamos llegaban muy bien. Al final se ha quedado fuera Nairo Quintana porque, de todos, era el que nos daba mejores alternativas en su calendario, que ahora incluirá Madrid, Picardie y Dauphiné, que es una carrera que le encanta. Es un chaval muy joven y a pesar de que confiamos muchísimo en él, la montaña de este Giro está muy al final y corríamos el peligro de que se le hiciera largo porque nunca ha corrido una vuelta de tres semanas.
Llegamos con la moral muy alta y después de 12 victorias que nos dan tranquilidad y nos hacen llegar especialmente motivados. El año pasado llegamos en una situación similar y el balance fue muy positivo, o sea que esta vez esperamos seguir por el mismo camino. Sobre el recorrido, su gran particularidad es que el 90% de la dureza de está concentrada en los dos últimos fines de semana. Para perder el Giro, puede ser cualquier día; pero para ganarlo, los dos últimos fines de semana son los que van a decidir el vencedor. Si a algo obliga este Giro es a ser un buen escalador”.