Nacer Bouhanni (Cofidis) ha sido el vencedor de la primera etapa de la 96ª edición de la «Volta» Ciclista a Catalunya, con principio y final en Calella en un recorrido de 175,8km que incluía 5 puertos puntuables en su recorrido. Esto ha provocado, como cada año, una jornada inaugural nerviosa y selectiva.
Lluis Mas (Caja Rural-Seguros RGA), Cameron Meyer (Team Dimension Data) y Boris Dron (Wanty-Groupe Gobert) han formada la escapada del día, que en esta ocasión nunca ha tenido una diferencia mayor de los 6 minutos de ventaja respecto a un pelotón en que siempre ha controlado las diferencias el mismo equipo Cofidis, conscientes de sus posibilidades de victoria final.
Con todo, los escapados han coronado juntos el alto de las Guilleries (2a categoría), el Alto de Viladrau (3a categoría), y la estrella del día, el Coll Formic (1a categoría), que ha ayudado que el australiano Meyer se convirtiera en el primer líder de la clasificación de la montaña.
Ha estado en el alto del Montseny (3a categoría), que se coronaba a 40 kilómetros de la línea de meta, cuando los tres valientes han sido atrapados, provocando que en el gran grupo todavía quedaran ganas de batalla. El belga Louis Vervaeke (Lotto-Soudal) ha aprovechado la situación para atacar y coronar en solitario, siendo atrapado después del descenso por Georg Preidler (Giant-Alpecin), Brent Bookwalter (BMC), Matthias Frank (IAM Cycling), Alex Domont (Ag2r La Mondiale) y Maxime Bouet y Carlos Verona (Etixx-Quick Step). Con todo, nunca han tenido más de un minuto de ventaja, y un pelotón ensartado no los ha perdonado.
Tan sólo el intento en solitario de Nicolas Roche (Sky) en los últimos 5 kilómetros ha puesto en entredicho la resolución en un esprint en el grupo de 129 corredores que se han disputado la etapa y el primer liderato. Allá, Bouhanni ha demostrado ser el más fuerte, después de que sus lanzadores compitieran con equipos tan preparados como Orica-GreenEdge y Sky, y ha superado al británico Ben Swift (Sky), que venía de ser segundo en la Milán-San Remo, y al sudafricano Daryl Impey (Orica-GreenEdge).
Justamente, el mismo Bouhanni se llevó una gran decepción siendo cuarto a la Milán-San Remo disputada el sábado, un hecho que lo estuvo a punto de decidir para no venir a la «Volta» a Catalunya.«Fue una pesadilla, había hecho la cursa perfecta hasta el esprint final. He estado dos noches casi sin dormir, pero todo y la decepción he decidido venir por el equipo, porque la Volta es una grande carrera y porque me daba la oportunidad de conseguir grandes triunfos como este», ha destacado el francés en la rueda de prensa.
Siguiendo con la tradición de los últimos años, Bouhanni, que vestirá mañana el maillot de líder, ha sido preguntado si se ve con opciones de conseguir más victorias de etapa. «Es una carrera difícil con tantas subidas, con esta etapa se ha demostrado. Equipos como el Movistar siempre han puesto un gran ritmo y se hace duro, espero tener 3 o 4 opciones más de disputar esprints», ha cerrado el francés, que mañana tendrá una nueva oportunidad en la segunda etapa, con salida en Mataró y final en Olot.
fuente: La Volta