Nairo Quintana está a punto. El líder de Movistar Team para el inminente Giro de Italia logró este domingo en el Santuario del Acebo, final de la segunda jornada de la Vuelta a Asturias -177 km con inicio en Soto de Ribera-, su quinto triunfo del año y el tercero en un final en alto tras los obtenidos en Mas de la Costa (Vuelta a la Com. Valenciana) y Terminillo (Tirreno-Adriático). Un triunfo con plus por las terribles condiciones meteorológicas a las que todo el pelotón de la Vueltina hubo de hacer frente para alcanzar la cima final.
A resguardo con la ayuda de Héctor Carretero, que liberó de responsabilidad al conjunto dirigido por José Luis Laguía al invertir gran parte del día en la escapada, Movistar Team pasó a comandar el pelotón a una veintena de kilómetros de la conclusión y dirigió el ritmo en la primera mitad de la subida decisiva. Los ataques de Canuti (AZT) y, sobre todo, de Sergio Pardilla (CJR) obligaron a elevar el ritmo a los telefónicos. Primero, con Dayer Quintana, al ataque como avanzadilla, y después, con el propio Nairo, que demarró a unos 2,5 km del final llevándose a su rueda a Raúl Alarcón (W52) y sobrepasó acto seguido a su hermano camino del éxito.
Quintana, que en la llegada se hacía con su 36º triunfo en profesionales y el 21º en 2017 para Movistar Team -récord absoluto para el conjunto de Eusebio Unzué en sus cuatro décadas antes de disputar la primera Gran Vuelta del año-, queda 2º en la general a 7" de Alarcón con una etapa por disputar. La carrera terminará este lunes en Oviedo tras una fracción breve (125 km) y muy intensa con el paso final por el estrecho y revirado Alto del Violeo (2ª