Tranquilidad absoluta para Movistar Team camino de Fano, en un día de calor y altas velocidades que antecedió a la llegada complicada de Porto Sant Elpidio (viernes) y los finales en alto del sábado y domingo
El calor en la aproximación a la costa Adriática y el fuerte ritmo durante los 209 kilómetros de la quinta etapa del Giro de Italia en Fano -45 km/h de media ya durante la primera parte desde Modena- han sido las notas dominantes en un día que no ha dejado mayores novedades para Movistar Team a la espera de un segundo fin de semana con una etapa desafiante para los velocistas -Porto Sant Elpidio, mañana viernes- y dos finales en alto en Rocca di Cambio (sábado) y Lago Laceno (domingo).
El final de etapa, marcado por el fuerte ritmo de los equipos con aspiraciones de la general que descolgaron a algunos de los sprinters -no así a Cavendish (SKY), vencedor por segunda vez en estaCorsa Rosa por delante de Goss (OGE) y Bennati (RNT)-, no presentó así ninguna complicación para los nueve corredores de Movistar Team, entre los que se mantuvieron siempre en cabeza sus tres ciclistas mejor situados en la general: Giovanni Visconti, Beñat Intxausti y Marzio Bruseghin, a menos de 1 del todavía líder Navardauskas (GRM).
Por su parte el Euskaltel han arropado perfectamente a Mikel Nieve para que el navarro no cediese tiempo, fuese bien ubicado en cabeza de carrera y salvase cualquier contratiempo. En los últimos metros se ha producido un corte de cinco segundos del que no se ha beneficiado ningún candidato a los puestos de honor.
Amets Txurruka ha sufrido los rigores de la caída del día anterio, lo mismo que Miguel Minguez, que ha pagado el esfuerzo de los 32 kilómetros de contra-reloj individual que tuvo que realizar en la víspera, el día en el que la disciplina era por equipos. El bilbaíno pinchó en el primer kilómetro y tuvo que completar todo el recorrido en solitario.
