Ganador de la Copa de España junior en 2008, su paso por la categoría de plata sólo duró un año, ya que en 2010, con apenas 19, saltaba a profesional con el Andalucía. Tres temporadas en esa máxima categoría que hacían prever su consolidación definitiva, y más cuando el año pasado llegó a correr la Vuelta a España.
Pero la crisis se llevaba su equipo este otoño, en una historia bastante lamentable, y del Cambil se veía obligado a volver a ese escalón intermedio. “Lo peor de todo fue lo que se tardó en decir que no salía el equipo. Sabíamos que era muy complicado, pero teníamos la esperanza de que pudiéramos continuar, aunque fuese en continentales. Por ello, cuando comencé a buscar equipo ya todas las plantillas estaban cerradas”.
Eso sí, Lechuga sabía que en su actual equipo, el Cajamar, “no iba a tener problemas en que me hicieran un hueco. Todo fue muy rápido y así voy a correr este año, con la idea de volver en 2014 al campo profesional”. El jienense tiene claro que “quien me conoce ya sabe lo que hay, y poco tengo que demostrar”, aunque “no quiero que se olviden de mi y como soy un corredor ambicioso, intentaré ganar todo lo que pueda”.
Cuatro años y medio después, ayer volvía a vestirse de amarillo, como líder de la Copa de España, esta vez élite y sub-23. “La Copa es una de las competiciones más importante del año y era uno de mis objetivos. Por eso tengo que estar contento de haber cogido el liderato, aunque podría perderlo el próximo domingo en el Macario, que es una prueba más para velocistas”.
Volviendo a la cita de ayer, “Aiztondo era una de las pocas carreras que hice en 2009, pero el recorrido de entonces no tiene nada que ver con el que hicimos ayer. También corrí el Macario, que como te decía no me va mucho, y Valenciaga, que es una carrera de la que no hace falta decir nada, muy dura y que lógicamente espero que me vaya bien”.
De la misma forma reconoce que “aún no estoy en mi mejor momento de forma. Este año con todo lo que ha pasado comencé a entrenar tarde y aún me falta un poco. De todas formas hay mucho nivel en aficionados. Lo que espero es que la experiencia de los tres años como profesional salga a relucir y me pueda aprovechar de ello”.
Aparte del Valenciaga, Lechuga tiene señalada en su calendario la Clásica de Torredonjimeno, la prueba de su tierra. “En 2009 no la pude correr y me hace mucha ilusión. Además este año es bastante más dura en el recorrido y eso me va a ir bien”.
En estas dos pruebas de la Copa de España, aún no ha podido sacar muchas conclusiones. “Ayer vimos a García de Mateos muy fuerte y es un corredor a tener en cuenta en esta Copa, aunque no puntuase en Don Benito. Igualmente habrá que tener en cuenta a los Caja Rural como bloque, pero poco más se puede decir. Será a partir del Valenciaga cuando ya veamos quien va a luchar por la Copa y quien no va a ganarla”.
Por último, Lechuga no se olvida de su equipo. “Ya en la primera concentración vimos que había un grupo bastante bueno. Y lo demostramos en Don Benito ganando por equipos y ayer con mi liderato. Juan –el manager del equipo- está muy satisfecho y ahora si tenemos un objetivo claro, el equipo funcionará aún mejor”.
