El colombiano, bien respaldado por Movistar Team hasta el duro circuito final de Fermo en una veloz jornada, aumenta su distancia por el abandono de Yates (ORS) y cuenta casi 1 sobre Pinot (FDJ) a dos días de la CRI.
La defensa de liderato de Nairo Quintana (Movistar Team) en la Tirreno-Adriático comenzó este domingo con una larga y exigente jornada de 210 km en el interior del país, entre Rieti y Fermo, donde el colombiano y sus compañeros tuvieron que emplearse a fondo.
Dos peligrosas fugas -un intento de once ciclistas a inicio de carrera y, en especial, un cuarteto con el luxemburgués Jungels (QST) y el polaco Kwiatkowski (SKY)- obligaron a los Dowsett, Sütterlin, Amador, Oliveira o Bennati a exprimirse al máximo hasta el circuito final, una sucesión de muros donde Nairo, asistido por Moreno y un Castroviejo que hoy descendió hasta la 8ª plaza de la general, se manejó con enorme fortaleza. El líder de la escuadratelefónica llegó incluso a pasar al ataque en el penúltimo ascenso, Reputolo, a cuatro kilómetros de la llegada, rompiendo un grupo que con apenas una decena de unidades se presentó en meta con Sagan (BOH) como vencedor.
Al margen de los 6" de bonificación obtenidos por Pinot (FDJ), 2º en la llegada y que ahora viaja a 50" de Quintana, el gran cambio en la general este domingo vino propiciado por el abandono por enfermedad del británico Yates (ORS), hasta hoy principal amenaza en la carrera de un Nairo que tendrá mañana un trazado más tranquilo -168 km hasta Civitanova Marche- como obstáculo antes de la decisiva CRI del martes en San Benedetto del Tronto.
DECLARACIONES:
Nairo Quintana: “El ataque en la penúltima subida fue más que nada una aceleración para seleccionar y no llegar con todos los mejores al sprint, lo cual podía hacer que resultase una llegada peligrosa. ¿Sorpresa la victoria de Sagan? No lo creo. Le hemos visto ganar en todos lados. Pienso que corredores como él se toman jornadas así como una clásica, y este tipo de repechos les viene mejor que a nosotros.
Ha sido una jornada dura, pero mi equipo me ha arropado muy bien hasta el tramo final. Esperamos que mañana sea un día más sencillo para nosotros, que los equipos de los sprinters intervengan y conservemos este maillot. Por lo demás, creo que llego con una ventaja tranquilizadora para la CRI. Tampoco es que rodemos tan mal en la crono; por supuesto que hay grandes especialistas entre mis rivales, pero confío en que sea suficiente distancia para ganar la carrera. El margen me permite salir con calma el martes, yendo muy rápido pero con un punto de tranquilidad”.
