Aún quedan más de dos meses para el 2016, pero la mente de los corredores ya gira en torno a la temporada venidera. El último ejemplo lo encontramos en Nairo Quintana. El colombiano ha desvelado parte de su futuro calendario y aspiraciones.
Se ha propuesto correr en un mismo año el Tour de Francia, los Juegos Olímpicos y la Vuelta a España. Serán las pruebas sobre las que gire su preparación una vez inicie la pretemporada con el Movistar Team.
Nuevamente, se propone batir a Froome en el asfalto francés, pero no será el único ciclista importante al que deberá hacer frente al pronosticar las apuestas deportivas una carrera abierta, tal y como se puede ver aquí. Y es que será la última oportunidad de Alberto Contador de engrosar su palmarés, quien se retirará a finales de 2016 y estará muy motivado en busca de su tercer Tour. Además, siguen irrumpiendo en el pelotón internacional nuevos especialistas en carreras de tres semanas, el último Fabio Aru. Será el jefe de filas del Astana en detrimento de Vincenzo Nibali y ya demostró en la pasada Vuelta, de lo que es capaz con montaña de por medio.
Se compromete a lograr el oro el Río
Quintana tiene de sobra identificadas las bicicletas enemigas, lo que no le resta ambición. Si en 2015 se planteó como único objetivo la ‘Grande Boucle’, ahora a la carrera francesa une el deseo de sumar un oro olímpico. Nunca destacó en competiciones de un día, pero los Juegos Olímpicos le han hecho adquirir un compromiso con el pueblo colombiano. "No creo que sea complicado, sino que nos favorece ya que del Tour salimos con un gran fondo y ritmo", dijo en un acto público de Visa en Bogotá. Habla con conocimiento de causa, puesto que tiene una ligera idea del perfil de la prueba en ruta y dice que le puede beneficiar.
El desnivel juega a su favor y recordó su trayectoria por el Giro de Lombardia porque el trazado de ambas se asemeja, según su criterio. Ha tomado la salida dos veces en la última cita del calendario UCI (2012 y 2013) y en ambas entró entre los 20 primeros por meta. Fue undécimo en 2012 y decimosexto en 2013. Con ayuda de un equipo competitivo, promete que estará en la lucha por las medallas.
Por si fuera poco, empalmará Tour y Juegos con la Vuelta. Eso sí, salvo fracaso en las dos primeras, no correrá con el rojo en mente. Ya en la recién finalizada temporada tuvo que acudir a la Vuelta a por la victoria por no poder cumplir en Francia. Los fallos a lo largo de la primera semana le condenaron a ir a remolque de Froome y llegar con demasiada desventaja a los Alpes, por lo que solo pudo firmar el segundo puesto. Ya en la Vuelta un virus se cruzó en su camino y no pudo plantar cara a Aru. Parece que está gafado en la última de las grandes. No es la primera vez que un imprevisto le deja fuera del podio. Un año antes, es decir en 2014, una caída motivó su abandono, cuando lideraba la general y dio vía libre para que Contador subiera al peldaño más alto del podio
No cabe duda de que es el líder absoluto del equipo español, lo que hará a Alejandro Valverde recluirse en el Giro de Italia. Nunca antes tomó su salida, pero parece dispuesto a asumir nuevos retos tras un 2015 para enmarcar.
