Ricco mantiene el maillot blanco para Saunier Duval Scott

Triunfo para Thor Hushovd (Credit Agricole) en la segunda etapa de la 95ª edición del Tour de Francia. El ciclista noruego ha sido el más rápido en el sprint masivo en el que se ha decidido la jornada, de 164 kilómetros de recorrido, entre Auray y Saint-Brieuc. La etapa ha estado marcada por la fuga desde el kilómetro 25 de Chavanel (Cofidis) y Voeckler (Bouygues), a los que a falta de 55 kilómetros para el final se unían Lelay y Moreau (Agritubel), conformando un cuarteto que sería alcanzado a dos kilómetros del final. La clasificación general continúa encabezada por Alejandro Valverde (Caisse d’Epargne), mientras que Juanjo Cobo (13º hoy) asciende hasta la cuarta plaza gracias al puestómetro, a un solo segundo del líder. Por su parte, Riccardo Riccò (ahora 8º en la general) continúa vistiendo el maillot blanco de mejor joven de la carrera. La mala noticia para el SAUNIER DUVAL-SCOTT llegaba de la mano de Rubens Bertogliati, que sufría a una caída a 25 kilómetros del final que le relegaba del pelotón y que le hacía cruzar la línea de meta, en compañía del colombiano Soler (Barloworld), a más de siete minutos del pelotón. El ciclista suizo sufre un fuerte golpe en la parte derecha de su cuerpo –hombro, codo y pierna- con especial daño en el codo, en el que ha precisado de puntos de sutura. Sus heridas, en principio, no deben impedirle tomar la salida en la etapa de mañana. DECLARACIONES de Ángel Litu Gómez: ”Es mi primer Tour de Francia y en estos dos primeros días me estoy dando cuenta de todo lo que supone. Hay muchísimo nerviosismo en carrera y resulta muy difícil guardar la posición porque todo el mundo quiere estar delante. Este stress solo lo he vivido en las clásicas, pero allí se saben cuáles son los puntos clave y el pavés o los muros dejan a cada uno en su sitio. Aquí, en cambio, el nerviosismo es constante durante toda la etapa y ese ritmo ‘machacón’ de ir a cincuenta por hora te va desgastando. Estoy teniendo buenas sensaciones pero deseando que llegue el terreno un poco más duro porque a causa de mi caída en Flandes todavía tengo los tendones de la mano derecha muy sensibles. No puedo frenar del todo bien y eso hace que cuando llegan los diez últimos kilómetros y dejo bien colocados a Riccó y Cobo me dejo caer hacia atrás porque para estar ahí delante hay que estar al 100%. Si no, puedes provocar una caída. Hoy lo he intentado al principio porque Cobo me había avisado que en días como estos la escapada buena solía ser una de las primeras. Y casi acierta porque me he marchado por delante con gente del nivel de Voigt, Wegmann o Chavanel, pero al final no ha habido entendimiento y nos han cazado poco antes de hacerse la fuga que luego casi ha llegado”.