Aunque en un principio el ciclista italiano Roberto Ferrari causante de la caída del pasado martes en la tercera etapa del Giro de Italia no quiso en principio reconocer su error, la jornada de descanso le ha servido también de jornada de reflexión.
Así el ciclista de 29 años declaró ayer que en la salida de hoy pedirá disculpas, sobre todo a Mark Cavendish y al líder de la carrera Phinney, quienes fueron de los más perjudicados por la caída.
El campeón del mundo llegó incluso a pedir la expulsión de la carrera de Ferrari algo que no se ha producido.