Rodrigo García teme que terminen con su carrera deportiva

Rodrigo García iba a ser el jefe de filas del que iba a ser equipo ciclista profesional Extremadura en 2008. El ciclista firmó hace apenas un mes el contrato con el equipo de su tierra y se mostraba contento e ilusionado. Tras su paso por Kaiku y Fuerteventura, equipos en los que obtuvo buenos resultados y dos victorias de etapa en la última Vuelta a Asturias, iba a liderar un nuevo proyecto en el que se implicaban políticos y empresarios extremeños. Pero el cántaro de la lechera se rompió antes de llegar al destino de la UCI, la empresa presuntamente comprometida en el proyecto hizo marcha atrás y el equipo se ha quedado en agua de borrajas. La situación de Rodrigo García, como la de todos sus compañeros, es crítica: “La verdad es que la situación que estamos atravesando no es la mejor. Me siento engañado, porque firmé un contrato que ahora no tiene validez ni en lo económico ni en lo deportivo”. La Unión Ciclista Internacional amplió el plazo para la presentación de los avales a los equipos en situación irregular hasta el próximo lunes día 10. Los mentores del Extremadura ya han comunicado a sus corredores la imposibilidad de poder presentarlos. Rodrigo no termina de entender la situación en la que se encuentra: "Después de lo que a uno le cuesta llegar a profesional, no termino de asumir que con 27 años mi carrera pueda acabar porque otras personas no hayan hecho las cosas bien hechas”. “Como extremeño –dice el ciclista de Miajadas–¬ creí en el proyecto y era un orgullo representar a mi tierra, y hoy es mi tierra la que me puede hundir profesionalmente, ya que yo renuncié a otras ofertas por este proyecto. Me siento desilusionado”.