Movistar Team se llevó la peor parte en el accidentado final de la tercera etapa del Tour de Francia, 197 kilómetros entre Orchies y Boulogne-sur-Mer en los que se impuso por segunda vez el eslovaco Sagan (LIQ). Una caída en la parte delantera del pelotón a 30 kilómetros de meta afectó de lleno a dos de los hombres de la escuadra telefónica, José Joaquín Rojas y Juanjo Cobo. Indemne el cántabro -aunque con un problema mecánico que tardó en solventar-, el murciano quedó tendido en el asfalto con un fuerte golpe en el hombro que forzó su abandono.
Trasladado al Hospital de Boulogne-sur-Mer, los exámenes realizados han revelado la fractura, por tres sitios, de su clavícula izquierda. La lesión precisa de operación, por lo que el murciano regresará, en principio, mañana hacia España para ser intervenido lo antes posible e iniciar su recuperación.
Por delante, Movistar Team trató de seguir lanzando la carrera en las cuatro subidas de Tercera y Cuarta categoría previas a meta, con Iván Gutiérrez y Rui Costa escoltando a Alejandro Valverde. Sin embargo, un error de trazada en una curva a poco más de dos kilómetros de meta retrasó a cola de grupo al murciano, quien, en su intento de remontada, se veía condicionado por una última caída en la rampa final hacia la meta. A pesar de perder siete segundos, la organización neutralizó los tiempos del grupo de sesenta ciclistas en cabeza, lo que permite a Valverde continuar en la general a poco más de medio minuto de Cancellara (RNT) antes de las tres etapas para sprinters que se inician a partir de mañana (Abbeville-Rouen, 214 5 km).
DECLARACIONES Alejandro Valverde: “Así es el Tour, hay muchos nervios, mucho peligro. De momento, el objetivo que buscamos sigue estando ahí, estamos delante, he salvado un día peligroso por las caídas y no hemos perdido tiempo. Nos habían dicho antes de salir que había una curva peligrosa a derechas, pero cuando hemos llegado ahí no me funcionaba la emisora y no he escuchado lo que nos decían por el pinganillo. He pasado de ir el cuarto del grupo a ir el último y además en el repecho final me ha vuelto a pillar la caída que ha habido. Si estaba ahí a 2 kilómetros es porque tenía buenas piernas. Iba súper bien colocado y me había encontrado con fuerza en las cotas anteriores, sin problemas para pasar para adelante. Ya que me gustaría disputar un final así con Sagan, pero no estamos teniendo ocasión. Hay que darle la enhorabuena porque está demostrando ser el mejor en las llegadas de este tipo. No ha habido suerte hoy; ni por mi parte, ni sobre todo de Rojas. Ha tenido un Tour gafado y hoy lo ha acabado de rematar. La caída ha sido al lado mío porque íbamos delante y enseguida he visto que se echaba mano al hombro y que tenía mala pinta. Sólo me queda darle mucho ánimo y que se recupere lo antes posible”.