Tania Calvo y Helena Casas han conseguido su segundo oro consecutivo en la Copa del Mundo de pista, al adjudicarse la final de la velocidad por equipos ante la selección de Países Bajos, en la primera jornada de la segunda manga de la competición que se celebra en Apeldoorn (Países Bajos) hasta el domingo.
Las dos españolas marcaban el mejor tiempo, tanto en la clasificatoria como en primera ronda, con registros muy similares (33.698 y 33.690) lo que les llevaba a la final ante Países Bajos, que había hecho 33.807 en la ‘semifinal’.
Y las españolas no dieron opción, y con un tiempo de 33.442, es decir, dos décimas menos que las rondas anteriores, se hacían con el oro, derrotando ampliamente a las neerlandesas Kyra Lamberink y Shanne Braspennincx, cuyo registro era en este caso superior al de las rondas precedentes, 34.025.
“Estaba claro que podían ganar, pero también que lo tenían difícil, pero lo han conseguido y con más autoridad si cabe, con más de medio segundo a las holandesas. Es cierto que falta mucha gente de Río, pero los registros no engañan y están a un nivel incluso superior al de los Juegos Olímpicos. Ahora vamos a terminar esta fase, descansar y volver a iniciar los entrenamientos porque en el Mundial de Hong Kong tienen mucho que decir”, valoraba el seleccionador, Salvador Meliá.
Cuarta plaza para el trío masculino
Por su parte, en la versión masculina, Alejandro Martínez, Juan Peralta y Pepe Moreno marcaban un excelente 44.714, dos décimas mejor que en Glasgow, que les llevaba al cuarto puesto en la clasificatoria, algo que hacía mucho que no se veía en un equipo de velocidad masculino. Además, al ganar a Países Bajos en la primera ronda, con un tiempo de 44.685 se clasificaba para la final por el bronce ante Alemania, un equipo a priori muy superior, y que se llevaría la medalla, aunque no con demasiada diferencia: 44.571 a 44.758.
“En este caso ha sido una sorpresa muy agradable, y sobre todo ilusionante. Sabía que si mejorábamos la arrancada, se notaría en los tiempos. Y con Alejandro, aunque aún es juvenil, lo estamos viendo. Aún tenemos mucho margen de mejora, pero lo importante es que vamos por el buen camino y resultados como el de hoy lo ratifican y nos cargan de moral”, añadía Meliá.
La cruz del día fue la persecución por equipos, ya que Vicente García de Mateos, Sebastián Mora, Eloy Teruel y Albert Torres no pudieron cumplir el objetivo de pasar el corte de los ocho mejores, quedando décimos con 4:06.719. La cuarteta arrancó muy rápido, con el mejor registro en el primer kilómetro (1:04.289) “y lo hemos pagado. Hay que trabajar mucho con este equipo, ajustando orden de corredores, relevos... No es algo que se vaya a notar de un día para otro”, comentaba el técnico valenciano.
Mora finalizaba vigésimo en un scratch muy descontrolado con diez corredores ganando una vuelta y otro más, con dos, el ganador, Raman Ramanau. “Es lo de siempre. Mora es el más vigilado y no le dejan moverse. O es el más fuerte, o atina con el momento justo con el movimiento correcto o le va a costar mucho ganar en esta prueba”.
Y terminamos con Ana Usabiaga, que finalizaba decimocuarta en el omnium, tras ser novena en el scratch, decimoctava en la japonesa y décima en la eliminación, “pero sin llevarse ningún punto en la puntuación es complicado estar más adelante”, terminaba el seleccionador.
La segunda jornada está programada en dos sesiones, de 12:30 a 16:09, y de 18:30 a 21:27, y tendrá, en lo referido a la participación hispana, la velocidad masculina (Peralta y Moreno), la puntuación masculina (Teruel), el keirin femenino (Casas) y los 500 metros (Calvo).
fuente:rfec.com
