El corredor del BZ Team Luis Alberto García vive ya la aventura de la Transpyr 2017 y cada día nos irá dejando sus crónicas. Así fue la primera etapa:
Etapa 01: 11 junio ROSES - CAMPRODON (116km, 2.100m pos. – 1.245m neg.)
La primera etapa de la Transpyr es un poco engañosa, etapa trampa que dirían algunos. Empieza muy rápido a través de campos de cultivo entre nubes de polvo que levantamos los corredores. De vez en cuando, algún charco y estirones en las curvas cerradas. Sesenta kilómetros prácticamente planos, rodando a veinte de media con un calor infernal. Y no será porque no nos lo han avisado desde la organización, que no corramos, que los excesos se pagan al final, que es la etapa con mayor número de abandonos, que no nos vayamos arriba que lo duro está al final… Debería ser el momento para familiarizarse con el uso del GPS, habituarse al calor e hidratarse bien en los avituallamientos. Pues nada, ni caso, calentón y a penar en las subidas duras de verdad, que vienen luego todas juntas al final.
Es la etapa que con los amigos haríamos al revés. Salir de lo alto, para ir bajando comodamente y acabar bañándonos en la playa de Roses. Buen plan. Pues no, esto es la Transpyr y hemos venido a cruzar los Pirineos de mar a mar. Así que toca empujar, apretar, cabecear y luchar en todas y cada una de las etapas.
He coincido con gente de muy diversos lugares. De Canadá viene una chica que anda como un tiro, Veronique. Suizos de Montreux, italianos de Bergamo, alemanes, gente de Sevilla, Madrid…
Lo peor del día una caída en los primeros kilómetros, despiste con la ruta y por intentar recuperar a mi grupo, entro pasado en la curva y al suelo. El terreno seco no ayuda nada. Lo mejor, unos buenos senderos bien colocados en el recorrido y la cerveza y el sándwich metido en el río, bajo el puente antiguo de Camprodon. Mañana más.
Camprodon km. 116 (11 de junio)